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La Guardia Civil requisa cuatro toneladas de anchoa en Portonovo

Marcos Gago Otero
m. gago SANXENXO / LA VOZ

SOMOS MAR

GUARDIA CIVIL

Los agentes actuaron en un barco sin cupo para esta especie e investigan el diario electrónico de otro

30 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Agentes de la Guardia Civil llevaron a cabo un exitoso operativo contra la comercialización ilegal de anchoa, con un despliegue especial en el puerto de Portonovo (Sanxenxo) que tuvo lugar el pasado martes. Los agentes se incautaron de cerca de cuatro toneladas de anchoas que supuestamente habían sido capturadas ilegalmente por un pesquero que encontraron atracado en este puerto de la ría de Pontevedra, aunque su base estaba en otra rada, según fuentes del sector.

El operativo se desarrolló de madrugada, cuando el Servicio Marítimo de la Guardia Civil, en el ámbito de sus competencias específicas, procedió a la inspección de varios barcos de pesca de arrastre que estaban atracados en el muelle portonovés.

De esta forma, los guardias civiles revisaron la carga de una embarcación donde se encontraron 3.900 kilos de anchoas. Los agentes decomisaron todo el pescado porque esta especie se encuentra en la actualidad en veda y porque, además, la embarcación aludida carecía de cupo autorizado para ejercer esta pesquería.

Banco de Alimentos

La mercancía fue entregada posteriormente al Servizo de Gardacostas de Galicia, que se ocupó de la entrega de este pescado a una de las delegaciones locales del Banco de Alimentos. Este es el destino habitual al que se envían los productos pesqueros procedentes de comisos, como ya ha pasado en otras ocasiones en esta ría, por ejemplo, con pulpo de tamaño no reglamentario.

En el operativo que se llevó a cabo en Portonovo, mientras se continuaba con las inspecciones a los barcos atracados en la rada, los agentes de la Guardia Civil procedieron a la denuncia del patrón de otro pesquero.

En esta segunda embarcación, la irregularidad se encontró en una supuesta falsedad documental en la anotación del diario electrónico de a bordo.

Según informaron desde la Comandancia de Pontevedra en una nota oficial, en este servicio telemático figuraban como registrados 4.500 kilos de verdel. Sin embargo, desde la Guardia Civil precisaron que «en realidad se trataba de anchoa, que ya había sido desestibada».

Por este motivo, la Guardia Civil mantiene abierta una línea de investigación para intentar determinar cuál es el destino final de este pescado, que fue capturado ilegalmente, con el objetivo de determinar responsabilidades en esta infracción de la normativa. Se trata de poner coto a la posible comercialización ilegal de este producto, que no solo no pasa por lonja, por lo que los infractores evitan su fiscalización y control sanitario, sino que también supone un incumplimiento de la normativa vigente sobre las estrictas cuotas de la anchoa, una especie sobre la que existe una creciente preocupación en el sector pesquero por su futuro.

En el transcurso de este dispositivo especial de control e inspección pesquera en el puerto de Portonovo colaboraron el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona), así como la patrulla fiscal y de fronteras de la Guardia Civil.