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Galicia exige a la UE igualdad de trato para sus especies de estrangulamiento

Cristina Porteiro
Cristina Porteiro BRUSELAS / CORRESPONSAL

SOMOS MAR

MARCOS CREO

Las autoridades gallegas piden flexibilidad ante el desembarco obligatorio del 2019

16 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Con la platija empezó todo. El total admisible de capturas (TAC) para esta especie en el mar del Norte fue suprimido de la lista por la Comisión Europea hace solo una semana, «al no mostrar efectos en su conservación». Una medida aplaudida por la flota que opera en aquellas latitudes y para la que este pez suponía un auténtico quebradero de cabeza. Como tantas otros, se le considera una «especie de estrangulamiento», de esas para la que se tiene poca cuota o aparece en cantidad tal que puede llegar a paralizar la actividad de una embarcación aún teniendo esta cupo para capturar otras especies.

Más al sur, la flota gallega se encuentra el mismo problema. Las especies para las que apenas tienen cuota caen en sus redes. Con la entrada en vigor de la obligación de desembarco plena para el 2019, esto supone un enorme problema que puede llevar a los buques a tener que paralizar su actividad de forma prematura.

Que se haya retirado la platija, «é un bo precedente», aseguró este miércoles en Bruselas la directora xeral de Pesca, Mercedes Rodríguez, que acudió a unas jornadas de trabajo y debate sobre las especies accesorias y la prohibición de los descartes. Para Galicia es una buena señal que Bruselas haya mostrado flexibilidad con los pescadores del mar de Norte, pero exige el mismo trato para el resto de la flota: «Espero que se apliquen solucións similares a problemas similares con carácter xeral. Se para uns caladoiros se aceptan determinadas medidas, por que en casos similares non se han de aceptar noutros caladoiros», deslizó Rodríguez.

Los «lastres» de Galicia

Galicia tiene los ojos puestos en el bacalao, el merlán y los eglefinos de Gran Sol además de la xarda ibérica y el ochavo, una especie para la que solo tres países de la UE tienen cuota: «Cando se nos acaba a cota de xarda, aínda que non a queiras pescar, a súa presenza fai que entre nos aparellos. Como se trata iso? Que facemos?», planteó. Y es que el problema con algunas de estas especies es que, aunque los stocks están en buen estado, las posibilidades de pesca para la flota son mínimas.

El sector está muy preocupado por lo que pueda pasar a partir del 1 de enero del 2019. Bruselas y los Estados miembro trabajan a contrarreloj para buscar soluciones que sirvan a los pescadores y no pongan en peligro los recursos marinos. La prohibición total de los descartes no se aplazará, eso garantiza el comisario de Pesca, Karmenu Vella. Sus expertos insisten en que las flexibilidades que ofrece la actual política común de pesca (PCP), con sus mínimis y top-ups, es suficiente y que no se han detectado hasta ahora problemas con las especies de estrangulamiento tras la entrada en vigor de la prohibición para algunas pesquerías.

Sin ánimo de desdecirlos, Mercedes Rodríguez matiza sus argumentos: «Hay que analizar caso por caso, porque hai flotas concretas que si teñen problemas e o están documentando».

¿Lo está pasando mal la Armada gallega? «Neste momento non hai problemas. Coa primeira prohibición de descartes, para os peláxicos, non houbo problemas, levamos dous anos coas pesqueiras demersais e ata este momento non está a haber excesivas dificultades», admite.

La explicación es sencilla: hasta ahora la flota afectada por la prohibición de descartes es muy pequeña, el grueso llegará el próximo año. Y lo peor un año siguiente: «Outra cousa é o que pasará a partir do 1 de xaneiro do 2019, que toda a frota estará incluída e tería que traer a porto todo o que capture e estea suxeito a TAC e cotas», anticipa.