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Sanidad intensifica la vigilancia del atún tras confirmar 154 casos de intoxicación

J. L. álvarez MADRID / COLPISA, EFE

SOMOS MAR

óscar cela

Expertos de la Comisión realizarán en octubre inspecciones en plantas productoras, distribuidores y proveedores españoles

28 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aecosan) ha intensificado la vigilancia sobre el fraude del atún rojo tras confirmar que este año 154 personas se han intoxicado por el consumo de este pescado. Por ese motivo, la agencia, dependiente del Ministerio de Sanidad, ha requerido a las autoridades autonómicas o municipales «la adopción de medidas inmediatas» para garantizar el «control de fraude y el control de mercado» en el caso del atún.

Una quincena de inspecciones

Según Aecosan, a lo largo de este año han sido realizadas 15 intervenciones por alta concentración de histamina en el atún. Su consumo causa picor de garganta, rubor y sudor facial, náuseas y vómitos, cefaleas y eritemas cutáneos que «no han supuesto un riesgo grave para la salud, aunque sí podrían implicar un fraude comercial o una inadecuada manipulación del producto», según la agencia. Y es que el pescado llega a pintarse con tintes vegetales para aparentar que está recién capturado y para venderlo como fresco una vez descongelado o para hacerlo conserva.

La Comisión Europea, «preocupada por este asunto», solicitó a España el pasado día 14 información de las actuaciones realizadas. Además, está previsto que en octubre expertos comunitarios realicen una nueva inspección en plantas productoras, distribuidores y proveedores españoles. Por ello Aecosan solicita a los responsables de consumo de las comunidades autónomas y del Ministerio de Agricultura y Pesca que informen sobre las acciones realizadas tras las instrucciones dadas el pasado mes de julio por la propia agencia para la comercialización de atún descongelado.

Anfaco destaca que no hay fraude en las conservas de túnidos

El secretario general de Anfaco, Juan Manuel Vieites, aseguró que «en ningún caso» hay fraude por atún adulterado en «la industria conservera, ni en la flota». Los casos denunciados «se deben a las malas praxis» y al «manejo irresponsable» de unos pocos operadores, como el añadido de aditivos o extracto de remolacha para que el pescado parezca más fresco y venderlo más caro.

«Las conserveras españolas son completamente ajenas a esta alarma, en nuestra industria tendrá un impacto cero», según el secretario general de la patronal del sector, pues «están preparadas» para esa visita de los técnicos europeos. Recalcó asimismo que el atún es el primer producto pesquero de exportación nacional y que sus industrias tienen todos los procesos «muy controlados».