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Mar recrimina a Bruselas la lentitud en resolver el problema de los descartes

Cristina Porteiro
cristina porteiro BRUSELAS / CORRESPONSAL

SOMOS MAR

cedida

Dice que la actividad es inviable si las cuotas coexisten con la obligación de desembarco

09 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El sector lo veía venir. Lleva tiempo alertando de que la nueva política comunitaria de pesca (PCP) es inviable y complica la actividad pesquera, pero la Comisión Europea no quiso escuchar. Bruselas se resiste a admitir que hay deficiencias -y gordas- en el reglamento. Incompatibilidades que pueden poner en un brete a la flota española y gallega. La aplicación de la reforma está siendo un quebradero de cabeza para el sector. 

La directora xeral de Pesca, Mercedes Rodríguez, acudió ayer a Bruselas para explicar a la Comisión y al Comité de Regiones Periféricas y Marítimas, los problemas que están detectando en la puesta en marcha de la política de descartes cero. Todos tienen el mismo origen: un mecanismo de reparto de cuotas deficiente y desfasado. «Ese modelo nace hai 30 anos nun momento no que non existe obriga de desembarque. Permítese o descarte. Non se teñen en conta as composicións naturais das capturas... Se agora se mete a variable do descarte, todo pode voar polo aire», aseguró tras la reunión. 

Esos desajustes en el sistema de asignación de cuotas han hecho que la UE pierda entre el 2008 y el 2014 unos 1.800 millones de euros de un millón de toneladas de posibilidades de pesca infrautilizadas, según denuncia la Xunta. Hay países europeos con mucha más cuota que la que pescan mientras otros socios, como España, hacen malabares para que su flota no tenga que apagar los motores por exceder sus exiguos porcentajes de capturas. La PCP no ha hecho más que complicar las cosas. «Hai moito traballo que facer. Solucións progresivas si, pero tamén rápidas», exigió Rodríguez, quien propuso a Bruselas reformar el actual sistema de reparto por otro en el que, o bien se permita alquilar o comprar cuota o un mecanismo que garantice un aumento de las posibilidades de captura hasta su techo máximo. 

Sin dilación

El sector tiene prisa. No puede esperar más. En el 2019  finalizan las prórrogas para adaptarse a las nuevas reglas. «Hai dúbidas sobre a súa aplicación e interpretación», dice la representante autonómica que percibe la obligación de desembarco «un ataque á liña de flotación do sistema de TAC e cuotas» vigente. En resumen: son incompatibles. 

La PCP no es la única preocupación que tiene ocupada a la flota. La salida del Reino Unido de la UE abre un nuevo escenario para la pesca. La Xunta trabaja ya con el equipo de la ministra Tejerina para tomar posiciones de cara a las negociaciones que arrancarán el próximo mes de marzo. «En todas as negociacións sempre hai oportunidades e intentaremos sacar melloras», dice Rodríguez. 

España hará un seguimiento exhaustivo del «brexit»

En Bruselas aterrizó también el nuevo secretario general de Pesca, Alberto López-Asenjo. Eso asegura el ministerio en un comunicado, porque el asturiano se negó a atender a la prensa. Durante su reunión con el director general de Pesca de la Comisión, João Aguiar, trasladó el interés de España en hacer un «seguimiento exhaustivo» del brexit para garantizar un reparto justo de las cuotas, el acceso a las aguas británicas, y el sostén a las condiciones de entrada al mercado.

La visita se enmarca dentro de la ronda de contactos que el Ejecutivo de Juncker está manteniendo con los Veintisiete Estados miembro de cara al diseño del equipo y la estrategia de negociación frente a Londres. La flota española quiere aprovechar el momento para emprender los cambios que Bruselas bloquea desde hace décadas.