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Galicia reclama un certificado de sostenibilidad común a toda Europa

espe abuín REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

RAMON LEIRO

Mar exige que se unifiquen criterios para evitar diferentes exigencias entre Estados

01 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Que la sostenibilidad -garantizar que las poblaciones de especies actuales pervivan en el futuro- debe ser una meta, nadie lo pone en duda. Por eso de un tiempo a esta parte se ha convertido en un valor. Un valor del que hay que presumir y al que sacar rédito, de ahí que cada vez más empresas estén interesadas en obtener un logo, sello, distintivo, certificado... cualquier documento que las distinga por su compromiso con la sostenibilidad.

En la pesca extractiva ha tomado posiciones el sello MSC, que garantiza que el pescado que luce esa enseña procede de stocks en buenas condiciones biológicas. En la comercialización se está distinguiendo el Instituto de Producción Sostenible (IPS), que promueve una cultura empresarial de contribución al desarrollo sostenible desde un enfoque económico, social y ambiental. La certificación que otorga esta organización sin ánimo de lucro refrenda que los procesos de elaboración son sostenibles, y el producto resultante es de origen renovable, reciclable y biodegradable. 

Desde ayer ya hay una compañía gallega que se ha visto recompensada con esa distinción. Es Mar de Mares, una empresa con base en el puerto de Marín, creada en 1983, que se dedica a la elaboración y comercialización de mariscos frescos y procesados. Es la primera compañía gallega que obtiene el sello de sostenibilidad IPS después de someterse voluntariamente al proceso de certificación del instituto y ya disponía previamente de la certificación 14001 en gestión ambiental. 

Tres vertientes

En la entrega del documento que acredita el compromiso de Mar de Mares con la sostenibilidad, la conselleira do Mar, Rosa Quintana, puso a la firma como ejemplo. Hizo hincapié en la importancia del trabajo conjunto entre «Administracións, empresas e a sociedade para conseguir unha aposta firme e decidida pola sustentabilidade», un fin que debe ser observado en sus tres vertientes: social, económica y medioambiental. De esta manera, la conselleira apeló a la necesidad de implantar «unha cultura na que o crecemento económico e a competitividade das empresas vaian da man do coidado do medioambiente». Y conviene que de esa responsabilidad debe hacerse gala con cualquier distintivo.

Ahora bien, para evitar confusiones y competencias desleales, la titular de Mar dejó clara su apuesta por «definir no marco europeo unha certificación que aglutine un deseño, un criteiro e unha implantación clara e igualitaria para todos os Estados membros». De esta forma, se podría acreditar «de maneira homologable a sustentabilidade da explotación dos recursos e o cumprimento dos estándares sociolaborais, sen diferenzas entre os Estados membros».

Mar fomenta con 29 millones la búsqueda de una pesca sostenible

Para que las empresas de pesca y acuicultura se entreguen de lleno a la búsqueda de la sostenibilidad en su actividad quizá sea un buen aliciente los 29 millones de euros que la Xunta destina a la consecución de ese fin. Según explicó ayer en Marín Rosa Quintana, ayer y anteayer se publicaron hasta nueve órdenes de ayudas que financiarán hasta el 50 % de las mejoras que realicen las pequeñas y medianas empresas (pymes) para fomentar la sostenibilidad ambiental.