Mujeres del sector pesquero pactan en Santiago crear una federación nacional
30 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Vale que a bordo de los barcos no hay mucha presencia femenina -quizás por la reminiscencia de supersticiones arcaicas que vinculan la mala suerte con la mujer dentro de un buque-, pero es indudable que su aportación al sector pesquero es indudable. Hay ámbitos en los que son claramente aplastante mayoría. Ahí está el marisqueo a pie, la reparación de redes, la industria de transformación, la comercialización, sin olvidar a las armadoras, ni a las técnicas náutico-pesqueras y a las gestoras. Total, que entre unas cosas y otras, la patronal Cepesca calcula que unas 5.000 mujeres desempeñan diariamente actividades relacionadas con el sector. Dar visibilidad ese lado femenino de la pesca y contribuir a su liderazgo es lo que ha movido a Cepesca a promover, aliada con el Ministerio de Agricultura, la Federación Española de Mujeres de la Pesca (Femupesca). Una fórmula asociativa que aglutinará a los colectivos femeninos dedicados a la actividad pesquera y acuícola que ayer, en Santiago, las asistentes se comprometieron a constituir de manera formal en mayo. Rocío Béjar, secretaria general adjunta de Cepesca, explicó que la federación aprovechará las sinergias de los diferentes colectivos activos en la promoción de la mujer en el mundo de la pesca en toda España para impulsar su liderazgo y participación activa en los órganos consultivos y ejecutivos del sector.
De redes a bisutería y muebles
La reunión auspiciada por Cepesca coincidió con la promovida por Economía y Mar sobre el programa Enredadas, con el que se pretende que las rederas gallegas abarquen más campo que el de la reparación de aparejos y la elaboración de bolsos, bisutería y otros complementos y se embarquen en otras acciones formativas para entrar en disciplinas como el interiorismo o el mobiliario. En el Rexistro Xeral de Artesanía de Galicia son ya cerca de 240 rederas las que están de alta, un 25 % más que hace 4 años, cuando Mar propició ese salto.