Uno de los gallegos del pesquero pirata «Kunlun» salió de Tailandia la semana pasada hacia su casa

Uno de los cuatro marineros gallegos que formaban parte de la tripulación del buque Kunlun, retenido en Tailandia a instancias de Australia por supuesta pesca ilegal en aguas de la Antártida ya ha abandonado el país rumbo a su casa. Según informaron a Efe las autoridades del país, el marinero salió la semana pasada.

Los otros tres gallegos permanecen en la turística Phuket, donde está fondeado el barco, a que las autoridades finalicen la investigación sobre la carga del pesquero retenido desde hace tres semanas por supuestas irregularidades, según informaron a la citada agencia fuentes de Aduanas: «Los tripulantes pueden desembarcar con libertad, no están detenidos», explicó Nimit Sangampai, director de la División de Investigación del Aduanas.

Los tres gallegos forman parte de los 36 tripulantes del pesquero Taishan, Kunlun antes de entrar en Phuket. Además de ellos están enrolados en el barco el capitán peruano, 31 indonesios, además del gallego que regresó. Aunque no ha podido ser confirmado, es probable que el que ha abandonado Tailandia sea el ribeirense Rafael Graña, que cuando el barco llevaba una semana retenido tuvo que ser evacuado a un hospital por las heridas que supuestamente se autoinfligió en los brazos.

Ningún marinero se encuentra detenido y tienen libertad para desembarcar y pasear por Phuket. Al barco sí se le prohíbe zarpar porque se le han detectado una serie de irregularidades, la principal, la de haber realizado una declaración falsa sobre el cargamento que llevaba: declaró 182 toneladas de mero gigante, cuando en realidad llevaba esa cantidad pero de merluza negra o de róbalo de profundidad (Dissostichus eleginoides).

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