Un producto que se rifan los deportistas por su contenido en proteínas, que comercializarán en diciembre
21 sep 2017 . Actualizado a las 22:52 h.Xermade contará la primera explotación gallega que comercializará huevos de gallinas araucanas o mapuches. Se caracterizan por el color azul de su cáscara y por su contenido en colesterol más bajo que el resto de las razas. Empezarán con 300 ponedoras. Vivirán en gallineros móviles, que cambiarán de finca periódicamente para que puedan aprovechar el pasto y los insectos, y se criarán bajo el sello ecológico. La docena tienen previsto venderla a cuatro euros. La granjas la está montando Silvia Durán Barro, una joven parada de 23 años, que se empezó a interesar por las características de las araucanas a raíz de que uno de los perros de la familia matara a la gallina de una vecina. Su dueña se llevó un gran disgusto porque de todo el gallinero el can eligió «a dos ovos azuis».
Para poder reponer el ejemplar que mató el perro, la madre de Silvia Durán, Mónica Barros, empezó a documentarse sobre este tipo y vio en él una esperanza de futuro para su hija parada. Descubrió que no funcionaba ninguna explotación en Galicia de mapuches, aunque sí localizó en Pontevedra a un criador que se dedica a varias razas de gallinas, entre ellas la que está a punto de implantarse en Xermade. Fue quien le facilitó algunos de los primeros ejemplares de hembras y de machos, que completó con otros comprados en Toledo. El criador pontevedrés, según Silvia y su madre, les enseñó muchas de las cosas que saben ahora sobre estas aves y les abrió el camino para poder montar la primera granja de huevos azules de Galicia, con ponedoras criadas al aire libre.
Las gallinas araucanas, que proceden del sur de Chile, no son ponedoras por excelencia, como otras razas. Producen, según señaló Silvia Durán, 150 huevos anuales, frente a los más de 200 de otros tipos. «Veñen poñendo -explicó- un día si e un día non, pero a calidade e moi diferentes e nos queremos apostar pola ela».
Libres en 2,5 hectáreas
Silvia Durán, que se sumó al programa de incorporaciones en la actividad rural de la Xunta, se puso manos a la obra hace año y medio. «O proxecto é para 1.000 galiñas. Imos empezar con 300. Temos dúas hectáreas e media de terreo e comerán co que piquen no chan e con cereais». Según la criadora, el tipo de alimentación es lo que diferencia los huevos que producen sus gallinas libres, de los que ponen las aves en régimen intensivo. «Se comen penso, saben a penso, non hai máis», apuntó.
Orégano contra los piojos
En las fincas en las que soltarán las gallinas de los huevos azules tienen previsto plantar orégano y tomillo, entre otras especies que utilizan habitualmente estos animales para protegerse de insectos, como los piojos.
La criadora eligió un sistema de gallinero móvil para que las aves siempre dispongan de verde a su alrededor. Inicialmente instalarán tres. El primero de ellos llegó a la finca de Xermade ayer, pero hasta el mes de diciembre la explotación no empezará a comercializar los huevos. Algunos tiendas especializadas saben del proyecto de Silvia Durán y se han puesto en contacto con ella para que les sirva. Este tipo es muy demandado por deportistas, por su alto contenido en proteínas y reposteros, dado que, aunque su yema es más grande que la del resto de las razas y su contenido en colesterol LDL (el malo) es más bajo.
Empezó con 30 ejemplares
La joven criadora se hizo con 30 ejemplares, entre machos y hembras, que le costaron cada uno 40 euros, un precio muy elevado si se tiene en cuenta que otras ponedoras se pueden conseguir por 10. Está incubando 70 huevos. Ni todos los polluelos saldrán del cascarón ni todos los que lo hagan servirán después como ponedoras o como reproductores. El objetivo es disponer de 300 gallinas para empezar a funcionar.
Tiene previsto comercializar la docena a cuatro euros en tiendas especializadas
Será la primera explotación de este tipo de aves que funcionará en Galicia