Visite esta iglesia de Vilalba si quiere dar una ayuda para su conservación

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS VILALBA / LA VOZ

VILALBA

OSCAR CELA

La parroquia de la capital chairega pide cooperación y abre la puerta a mostrar el estado del edificio

22 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay visitas guiadas a lugares de interés. El sacerdote Juan Pablo Alonso, miembro de la unidad pastoral de Vilalba, afirma que la iglesia parroquial y la torre de los Andrade, incorporada al parador, son los edificios más significativos de la localidad. La fortaleza medieval se ha abierto a visitas guiadas; la iglesia puede seguir el mismo camino, con posibilidad de que las torres, donde están las campanas y el reloj, sean observadas de cerca.

El que suba a esa parte del templo, además de unas vistas de la capital chairega, podrá comprobar que el edificio necesita reformas sin mucha demora. Esa es precisamente la razón por la que el sacerdote está dispuesto a organizar visitas, en las que además se podría ver de cerca el órgano, situado sobre la nave central.

Actuar en el tejado para evitar goteras y problemas de humedad que se ven, por ejemplo, cerca del órgano, es una de las principales necesidades. Los trabajos están previstos en tres fases e incluso se ha adjudicado la primera. La empresa vilalbesa Construcciones Cholo es la encargada de las obras.

La primera parte incluye mejoras en la fachada, en las torres y en la cubierta situada sobre el coro, en donde está colocado el órgano. Esa fase tiene un coste de 23.000 euros, y el presupuesto del que se dispone en estos momentos apenas llega a la tercera parte (8.000 euros aportados por el Obispado de Mondoñedo-Ferrol, procedentes del fondo diocesano de obras).

OSCAR CELA

Para completar la cantidad necesaria se lleva a cabo, desde la semana pasada, una captación. Hay sendas cuentas abiertas en dos sucursales de la villa y también se pueden entregar donativos en metálico; los que colaboren pueden decidir si se publica su nombre o no y pedir un certificado para desgravar en la declaración de la renta.

Alonso confía en una colaboración ciudadana, que no sería una novedad, puesto que la parroquia tiene unos 170 cooperantes, aunque las cantidades que aportan son variadas. Como último recurso, dice, estaría dispuesto a solicitar un préstamo para cubrir el presupuesto, aunque eso significaría el final de las mejoras en el templo parroquial, inaugurado en las fiestas de San Ramón de 1893. La segunda fase consistiría en trabajos de pintado en todo el interior de la iglesia, incluidas las cúpulas, y la tercera, mejoras en los canalones y tareas de pintado exterior.

OSCAR CELA

La parte del techo situada sobre el coro es unas de las más necesitadas de arreglos. En esa zona está el órgano, cuya construcción, dice Alonso, es de 1914. El instrumento musical aún funciona, a diferencia de lo que ocurre, por ejemplo, con el reloj. Hace falta darle cuerda cada dos días, pero la humedad y el deterioro de las escaleras de acceso dificultan la subida.

Alonso recalca que la iniciativa solo se completará con colaboración ciudadana. «Se interesa e a xente se implica, restaurarase. Se ten que quedar sen restaurar, queda». Incluso opina que lo que está en juego es la posibilidad de que la capital chairega ofrezca una mejor imagen a los visitantes. «Farase o que a xente estea disposta a apoiar. Depende de nós. A Angela Merkel non lle preocupa isto», asegura el sacerdote.

Construcción difícil y moderno toque de campanas

Xosé A. Pombo, que publicó en este periódico una serie de reportajes al cumplirse los 125 años de la inauguración del templo, escribió (14 de febrero del 2018) que las obras se habían iniciado en abril de 1865 y parado seis meses después por falta de fondos. En años siguientes, con altibajos, fueron ejecutándose. A la iglesia no le faltaron avances últimamente, pues se instaló, por ejemplo, un mecanismo que permite tocar las campanas desde un teléfono móvil.