Adiós al monopolio de los cursos de recuperación de puntos

José Fernández LUGO / LA VOZ

VILALBA

MARCOS CREO

Una segunda autoescuela fue autorizada a impartir las clases que hasta ahora solo organizaba una

22 nov 2018 . Actualizado a las 18:34 h.

El monopolio de los cursos de recuperación de puntos que garantizan el poder tener un número suficiente para poder conducir un vehículo a motor se rompió en Lugo. Hasta no hace mucho, solo una autoescuela organizaba las correspondientes sesiones para quienes debían someterse a la recuperación. Ahora, la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) otorgó también la autorización a otro centro de educación vial. La situación, hasta ahora, en la capital lucense resultaba atípica: en Santiago había posibilidad de elegir entre tres establecimientos y otros tanto en A Coruña. En Ourense, sin embargo, el negocio está en manos de un único centro.

En el sector de las autoescuelas de la capital se asegura que la recuperación de puntos es un buen negocio para cualquier centro por varias razones. En primer lugar, porque cada fin de semana,«caen» multitud de puntos entre conductores que son detectados cometiendo algunas infracciones graves por parte de agentes de la Guardia Civil o incluso de Policías Locales. En segundo, porque no hay riesgo de impagos. Un curso de recuperación de puntos no es lo mismo que la obtención del carné de conducir, trámite que no tiene porqué pagarse al contado, aunque esto depende de cada autoescuela. «Asistir a un curso de recuperación de puntos no es posible si previamente no se hace un ingreso bancario y se presenta el correspondiente justificante. Riesgo de no cobrar: cero», indicó una fuente del sector. Los precios oscilan entre cantidades que varían entre los 400 euros, más o menos, si la recuperación total y aproximadamente la mitad si se trata de un curso de obtención parcial.

En la capital estaban organizándose, hasta ahora, cursos cada fin de semana. «Podría hablarse de una participación de una media de diez alumnos en cada uno de ellos. Eso daría unos cuarenta al mes. Al año el volumen de participantes podría ser de unos quinientos», expresaron desde el sector.

En el resto de la provincia lucense hay autoescuelas que ofrecen los cursos en Vilalba, Foz y también en la zona de Monforte. Los conductores de la ciudad y municipios limítrofes e incluso de A Ulloa tendrían como referencia las dos autoescuelas lucenses.