El Concello de Vilalba asumirá el coste de ampliar el polígono

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS VILALBA / LA VOZ

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Los ingresos de la venta de parcelas se usarán para afrontar los gastos de urbanización de la futura superficie

08 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El polígono industrial de Vilalba está próximo a una nueva ampliación. A diferencia de las anteriores, el papel del Concello en esta será mayor, ya que se da casi por seguro que asuma los costes de la actuación, centrados fundamentalmente en la urbanización de la zona; para ello contará con los ingrersos de la venta de parcelas como fuente de financiación.

Los planes del Concello recogen la creación de otros 300.000 metros cuadrados de suelo industrial. La superficie que se convertirá en la nueva fase está situada hacia el este del parque empresarial de Sete Pontes, comprendida entre la carretera de Lanzós y el antiguo trazado de la carretera N-634.

La ampliación supondrá la creación de otros 300.000 metros cuadrados. El alcalde, Agustín Baamonde, explicó anteayer que si se cumplían los actuales planes, se llevaría al próximo pleno, que se celebrará en julio, el expediente para la calificación de suelo industrial de ese terreno. No obstante, la catalogación no supone que se afronte en un solo proceso la preparación de 300.000 metros cuadrados más, sino que más bien se prevé, como apuntó el regidor, que la ampliación se lleve a cabo en varias fases, seguramente tres.

 Planes de empresas

El coste que tendrán las parcelas todavía no está concretado, aunque se espera que en cantidades cercanas a las de otros polígonos y que el precio no sea un freno para la llegada de nuevas empresas. Baamonde manifestó ayer que al Concello llegaban periódicamente consultas sobre la existencia de suelo industrial en venta, por lo que consideró necesario llevar a cabo una actuación como esta.

También la asociación de empresarios de Sete Pontes ha mostrado en más de una ocasión un punto de vista favorable a la ampliación del polígono, argumentando que la situación de Vilalba, en la confluencia de dos autovías, puede ser un estímulo para el asentamiento de empresas.

Un crecimiento con pasos complicados

El que lleve años sin visitar la parte más al este del polígono de Vilalba afirmará sin duda que el parque empresarial ha alcanzado últimamente una notable expansión. Las naves construidas -con grandes empresas y con pymes, con pequeñas fábricas y hasta con una inspección técnica de vehículos en funcionamiento- demuestran que esa impresión es verdadera, pero tampoco es falsa la constatación de que los planes de ampliación han sufrido varios vaivenes.

En la pasada década, con una situación económica en la que la crisis aún no afectaba con intensidad, el Concello pretendía crear otros 700.000 metros cuadrados de suelo industrial: había una bolsa de terreno que tenía esa catalogación en las normas subsidiarias, y se preveía reservarla a grandes empresas. Sin embargo, ni el plan llegó a tener desarrollo alguno, ni las circunstancias económicas acompañaron.

La última Lei do Solo aprobada por la Xunta dejó como suelo rústico el que antes era industrial; el pasado otoño, no obstante, Baamonde anunciaba que parte de los terrenos colindantes con el polígono habían entrado en la consideración de Área de expansión de Galicia, lo que permite realizar esa ampliación.