Los recibos de pagos del IBI del 2015 en la zona rural vilalbesa quedan anulados

La amenaza de un nuevo catastrazo en Vilalba parece definitivamente superada. El alcalde, Agustín Baamonde, afirmó ayer que los recibos correspondientes al año 2015, sobre el que se centraba el temor de pagos por atrasos, habían quedado anulados, y agregó que la gerencia del Catastro había notificado esa postura a la Diputación, organismo encargado del cobro.

A aquellas personas que hayan efectuado ya los pagos se les devolverá el dinero. Así lo entiende Baamonde, que no cree que tener pendiente de realizar el pago pueda suponer un problema para quienes se vean en esa situación. El Sindicato Labrego Galego, que ha asumido en solitario la denuncia de la situación planteada, mostró ayer su inquietud ante la posibilidad de que no pagar esos recibos afectase a la consecución de ayudas de la Política Agraria Común (PAC). El regidor vilalbés, en cambio, sostiene que esa circunstancia no tiene por qué influir en la tramitación: el que se vea en esa situación, dijo, debe pedir un certificado que aclare por qué tiene pendiente ese pago.

 Semanas de críticas

La situación creada fue expuesta hace varias semanas por el SLG. La organización avisaba entonces de que se estaban mandando cobros de recibos correspondientes al 2015 a construcciones de la zona rural -unas 1.200, según sus cálculos- cuando, en su opinión, ese año quedaba fuera del alcance de las revisiones realizadas.

Tras las primeras críticas y ante el temor a un nuevo catastrazo, el alcalde anunció que esas notificaciones serían revisadas de oficio.

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