Botas de marca de 180 a 40 euros, zuecas a 29 y zuecos de diseño a 70 son algunos de los precios de la feria
27 nov 2016 . Actualizado a las 08:52 h.En el mercadillo de Frigsa es «black friday» todo el año. Así lo pregonan algunos de los muchos vendedores que acuden regularmente los martes y los viernes a esta feria urbana en la que se presentan las últimas tendencias en artículos especialmente para el rural, que también existe. Si en As Termas la novedad pueden ser los teléfonos con mil y una funciones, en el mercadillo lucense lo son, por ejemplo, los guantes especiales para usar durante la matanza de cerdos, que está a las puertas.
El puesto de Roberto es una de las grandes referencias del mercadillo. «Tengo unas botas Camper de mujer de 150 euros a 40. Pero mejor estas de Pedro Miralles, de 180 que las dejo en 40. ¿Qué más «black friday» queremos? Nuestros precios son imbatibles todo el año, en artículos de productos de máxima calidad y sin ningún tipo de engaño como suele ocurrir con algunas cadenas», asegura este vendedor que tiene una clientela fija que le visita martes y viernes en busca de la gran ganga.
¿Y cómo es posible vender botas marcadas en 180 euros por 40? Fácil. Son restos procedentes de tiendas que, en algunos casos echaron el cierre y que Roberto adquiere en bruto para luego vender en los mercados. De ahí que no siempre tenga la misma mercancía. Un mes pueden tocar zapatos y en otro ropa de bebé.
«Miguel Vieira é un grande deseñador portugués de zapatos. Chegan só a tendas especializadas e os prezos dun par non baixan en ningún caso dos 200 euros. Pois, por sorprendente que pareza, hai dous meses vendéronse no mercado a 15 euros. Conseguín dous pares do meu número e evidentemente compreinos», explicó Lucía Fernández, una cliente incondicional del «black Frigsa».
En el mercadillo hay muchas más cosas de diseño. De esas que no se pueden comprar en el Amazon. Basta ver el mostrador de la zapatería Daniel de Vilalba para darse cuenta de que no todo es «shop online» ni «hipster desing». Y como ejemplo están las zocas de Alberto Geada, uno de los grandes creadores de un calzado que sigue sobreviviendo.
El precio de un par de zocas tradicionales de este creador mariñano en el mercadillo es de 29 euros. Los zocos normales, 50 euros y los de diseño rompedor, con cuero tintado en color rosa y otros elementos decorativos, 70. Estos llevan el sello de Elena Ferro, que tiene el taller en Merza (Vila de Cruces).
En «black Frigsa» no faltan los tradicionales mandilones que están en el «top ten» de las mujeres rurales o los calzoncillos de felpa.