Cruceiros y cristos, la cara y la cruz del patrimonio artístico de Vilalba

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MAría PALACIOS VILALBA / LA VOZ

VILALBA

PALACIOS

La abundancia y el valor de estos elementos contrasta con la falta de medidas de promoción masiva

07 nov 2016 . Actualizado a las 12:51 h.

Cruceiros, cristos y cruces son elementos destacados del patrimonio artístico vilalbés y chairego. El cristo de Lanzán, situado en la parroquia de Tardade, es quizá uno de los más famosos: fue incluido, hace años, en una señalización de lugares de interés de la comarca, y se acaba de colocar un nuevo panel, con explicaciones en gallego, español e inglés. Sin embargo, la abundancia de construcciones de ese tipo -hay más de 150 en el municipio- permite contemplar esas filigranas en piedra en numerosos lugares del extenso ayuntamiento de Vilalba.

 ABUNDANCIA

Fáciles de encontrar. El que se acerque a una iglesia de la zona rural de Vilalba puede encontrar un cruceiro, un cristo o una cruz en sus inmediaciones. Así ocurre, por citar solo unos pocos ejemplos, en Goiriz, en Codesido o en Alba. Pero son igualmente fáciles de ver en el casco urbano: Catro Camiños, el entorno del Parador de Turismo, la Rúa do Calvario, la Rúa dos Pepes o la Rúa Rouco Varela permiten contemplar esas construcciones.

 UTILIDAD

Variada función. Una de las funciones que se atribuye a los cruceiros es la de cristianizar lugares de culto indoeuropeo, anterior al cristianismo. Sin embargo, cumplen también otro tipo misiones. Hay cruces que marcan término, como una división entre parroquias: en pleno centro de Vilalba, en la Rúa dos Pepes, una cruz recuerda que aquel era el límite de la parroquia de Santa María con la de Sancobade, que antaño abarcaba gran parte de la villa. También pueden alzarse en encrucijadas de caminos: por ejemplo, en Catro Camiños, en el casco urbano vilalbés, se alza un cruceiro en la confluencia de dos antiguas rutas, la de Ferrol y la de Viveiró (Muras). Por otro lado, hay cristos, cruces y cruceiros votivos, relacionados con ofrendas y promesas. Un último grupo, menos numeroso, son las cruces de cristianización, levantadas para recordar muertes violentas o enterramientos no autorizados por el cristianismo.

  FAMA

Los Carboeira, una destacada familia de Román. Domingo Seoane, nacido en 1790, está considerado el primer canteiro del que se tiene constancia en la parroquia de Román. Puentes y cruceiros, entre ellos el cristo de Lanzán, son obra de esta familia. Su labor fue continuada por varias ramas de generaciones siguientes, con trabajos presentes en Terra Chá y en A Mariña.

 AVANCES

Conexión con otros elementos. La señalización del cristo de Lanzán colocada hace varias semanas está mejor situada que la anterior, pues se colocó a unos metros y permite verlo sin el panel al lado, como ocurría antes. El panel tiene un código QR, que permite acceder a la página web del Concello y disponer así de más información del patrimonio local.

 LENTITUD

Falta de medidas. Ni Vilalba ni otros concellos de la comarca, juntos o por separado, han llegado por ahora a crear un itinerario que divulge esta singular riqueza. Entidades y ayuntamientos han organizado actividades y excursiones de promoción, pero propuestas concretas y prolongadas ayudarían a difundir estos elementos. Sí hay obras sobre los elementos presentes en Vilalba y de otros concellos, que han estudiado investigadores como Fernando Arribas, Mario Saavedra y José Manuel Blanco.