Guerra civil en la residencia de Sarria: las trabajadoras acaban divididas por los conflictos de Garrido y Escontrela

Uxía Carrera Fernández
U. CARRERA LUGO / LA VOZ

SARRIA

Residencia de Sarria
Residencia de Sarria ALBERTO LÓPEZ

Un grupo de empleadas cargó contra el alcalde y otro se desvinculó asegurando que «tenemos claro que está detrás de esta campaña de desprestigio»

04 feb 2023 . Actualizado a las 19:57 h.

El uso de la residencia de mayores de Sarria como arma política entre el alcalde Claudio Garrido y el concejal cesado de sus cargos Benjamín Escontrela, exsocios de gobierno, no ha tardado en terminar afectando a las trabajadoras.

Dos grupos diferentes de empleadas quisieron publicar comunicados distintos. Unas en contra de Garrido y, las otras, criticando a quien «tenemos claro que está detrás de esta campaña de desprestigio». Las primeras se pronunciaron a raíz del debate sobre el nuevo presupuesto de la residencia.

Este martes, denunciaron que Garrido «está utilizando a las empleadas y a los usuarios» para conseguir votos a favor de los presupuestos del Concello y de la residencia, que irán a pleno para su aprobación la próxima semana. Estas trabajadoras criticaron que el alcalde quiere aplicar cambios en personal para puestos «que ya cumplían los ratios». Defendiendo así la gestión del anterior responsable, el edil cesado Benjamín Escontrela.

Sin embargo, ante este comunicado el grupo de «cuidadoras fijas e interinas» saltó para desvincularse de sus declaraciones. Pidieron que «si publican algo pongan su nombre y no usen a todo el personal para sus fines», recriminando que hablaran en nombre de toda la plantilla del centro. Contradijeron a sus compañeras asegurando que «precisamente si estamos pidiendo refuerzos y más personal es por que no se han cumplido los ratios».

Aseguraron que «tenemos claro quien esta detrás de esta campaña de desprestigio en la que nos quieren meter a las trabajadoras». «Dedíquense a hacer política decente y pónganse a trabajar por el bien del geriátrico y sus empleados, a no ser que quieran cerrar sus puertas», sentenciaron.

Tras estas palabras, el primer grupo de empleadas quiso volver a sacar un comunicado, aclarando que son solo una parte. Esta vez, manifestaron su «preocupación» por un brote de gastroenteritis entre residentes y trabajadoras. Creen que la causa es «el mal funcionamiento del servicio de limpieza», asegurando que hay días que no se realiza y otros en los que solo está una persona. También influye la «ausencia de gestión». Volvieron a denunciar que siguen sin dirección, administración, médico ni enfermería. «El señor Garrido ignora los problemas reales del centro mientras se dedica a subir las tasas».

Informe de presupuesto

Las discrepancias entre trabajadoras saltaron a raíz del nuevo presupuesto del geriátrico para este año. Precisamente de su aprobación depende de dar luz verde a la cuentas generales del Concello. El gobierno local ya contempla la partida de los ingresos de las nuevas cuotas de los residencias, pero todavía no se han aprobado. Por tanto, intervención registró un informe desfavorable. Será el próximo martes cuanto la corporación haga la votación definitiva de ambos presupuestos.