El extraño caso del contrato de la luz en Sarria: sostenible, pero privatizado
SARRIA
El ayuntamiento aprovechó el cambio a luces led para entregar el servicio
18 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) puso a disposición de todos los concellos de España un plan de subvenciones para cambiar la iluminación pública a bombillas led, con el objetivo de ahorrar y reducir la contaminación lumínica. El Concello de Sarria, como la gran mayoría de los municipios, también decidió acogerse a estas ayudas.
Los concellos apuntados en este programa contrataron a una empresa para la compra y el cambio de las luces led subvencionado al 80% por el IDAE y con una inversión del 20% del Concello. Con el ahorro que aporta este tipo de iluminación, más la ayuda de 3,2 millones que otorga el IDAE, en apenas dos años los gobiernos locales ya habrían recuperado la inversión del servicio público. Pero el Concello de Sarria ha actuado distinto. Además de adjudicar a una empresa la instalación de estas bombillas, también la ha contratado para el futuro mantenimiento y suministro durante los próximos 20 años. De esta manera, será la entidad privada la que pague la luz a Fenosa de las calles y edificios públicos, además de encargarse de su conservación. El ayuntamiento contrató a la empresa valenciana Monrabal por 13,5 millones y por 20 años. Según el portavoz del partido popular, Jose Antonio García, es el único concello de Galicia, del que tienen constancia, que haya aprovechado las ayudas del IDAE para privatizar el servicio eléctrico municipal.
El gasto en luz anual de Sarria ronda los 550.000 euros y con la instalación de bombillas led ahorraría el 76%, es decir, 418.000 euros. La adjudicación a la empresa del mantenimiento y suministro de la luz implica que el ahorro que suponen las luces led no llegue al Concello, según el PP y el PSOE, que desde el inicio se han mostrado críticos con el contrato. Los 418.000 euros que la administración local se ahorra gracias a las nuevas bombillas no le pertenecen, ya que ahora es Monrabal quien va a pagar a Fenosa un importe reducido por las luces led. El canon que el Concello paga a la empresa no tiene en cuenta el futuro ahorro, sino que se estableció según la situación anterior, por lo que cuando las bombillas led reduzcan el coste al 76%, el beneficio ya pertenecerá a Monrabal. Y mientras tanto, los vecinos de Sarria siguen pagando lo mismo.
El Concello de Sarria justificó esta contratación con que supondría un menor coste para el ayuntamiento que el actual. El gobierno local ya emitió sus primeras facturas para Monrabal, que son de 53.770 euros al mes. Anualmente, suponen 645.240 euros de gasto, que en 20 años sumarían los 13 millones y medio, según el Concello. Pero esos 645.240 euros son superiores a los 550.000 que anualmente cuesta ahora la luz municipal, por lo que no se daría ningún ahorro. Respecto a estas cifras contradictorias, el alcalde, Claudio Garrido, no respondió a las llamadas. Además, los 3,2 millones citados anteriormente de la subvención del IDAE todavía están en el aire, ya que no han sido aprobados. «Esta axuda cubre a compra das bombillas por parte dos concellos, pero neste caso a realizou a empresa privada», explican desde el PP.
El partido de la oposición insiste también en que los cuadros de beneficios presentados por la empresa muestran cifras mayores a los 13 millones de euros. «O propio contrato di que o importe do canon vaise axustando ao prezo da luz, polo que pode ir aumentando», explican. El PP insiste en que el gasto real serán más de 20 millones, basándose en la cuenta de explotación publicada por Monrabal. En este documento, la cifra de los ingresos es de 22,8 millones de euros para los 20 años.
Por otra parte, también es una particularidad que el contrato tenga una duración de 20 años, ya que la iluminación no es una materia constante, sino que los sistemas utilizados tienen que ir cambiando. «Así Sarria está hipotecada para os próximos 20 anos», sentenció la socialista Pilar López. Esta gran duración del contrato implicó que las empresas locales o gallegas no se pudieran presentar porque no pueden hacer frente a tal inversión.
Dos recursos en el Contencioso
Además del inusual contrato, el proceso de selección de la empresa adjudicada también fue poco común. El alcalde, Claudio Garrido, avisó con cinco minutos de antelación al resto de la corporación de una comisión extraordinaria para adjudicar la contratación, sin dar explicaciones. El tribunal de adjudicación estaba presidido por el propio alcalde, acompañado de técnicos de una empresa privada de Madrid a la que el Concello contrató como asesoría. Cuando para este tipo de procedimiento es habitual contar con funcionarios locales, de la Diputación o la Xunta con formación en material industrial o eléctrica. El PSOE de hecho interpuso dos recursos ante el Juzgado de lo Contencioso contra el Concello ya que reclaman que lo que tenía que haber hecho Garrido era un acuerdo de pleno, pero emitió un decreto. ¿Por qué?, pregunta la oposición.