Los poemas de Luís López inspiraron las fotografías de Rafa Mallo, ahora expuestas en el pub sarriano Xarope
13 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El sarriano Luís López es farmacéutico y acaba de terminar el Grado en Ciencias del Lenguaje y Estudios Literarios. Rafael Mallo, coruñés asentado en Lugo, es el batería del grupo Triángulo de Amor Bizarro. Son viejos amigos de bar y de conocidos comunes. Lo que más los une es una «gran sintonía» que les permite crear proyectos artísticos comunes. En el caso de Luís López, con la afición que ya le ha dado varios premios y hacia la que quiere ir destinando su vida: la poesía. Y por parte de Rafael Mallo, con lo que en un principio había estudiado como formación profesional, pero a lo que finalmente no dedicó su vida: la fotografía. López acaba de presentar su primer poemario, «Salífero», acompañado de una exposición fotográfica de Mallo inspirada en el libro.
En cada punto de presentación la parte visual expuesta es diferente porque el escritor siempre estuvo interesado en darle varias formas a una misma creación artística. «Nunca me gustou iso de escoitar o poema tal cal, senón que me interesa a conexión do mundo poético dende outros focos», explica. El sarriano lleva escribiendo en revistas poéticas y distintas publicaciones desde hace años, además de participar en premios literarios, consiguiendo el galardón Minerva. Dio el paso a realizar su primera publicación compilada cuando vio que había conseguido la coherencia adecuada. «Antes non publiquei porque non estaba conforme coa esfera editorial nin co que eu mesmo escribía, non estaba seguro», cuenta. Cuando Luis terminó este poemario tuvo claro que quería acompañarlo de lo audiovisual. Fue entonces cuando pensó en la fotografía de Rafa para visualizar sus poemas. «É deses que se ten que traballar 10 horas, pois as traballa», lo define.
El músico coruñés aceptó el proyecto con unas directrices principales, pero no se lo enseñó a su compañero hasta el resultado final. «Os poemas de Luis son esixentes para o lector, incluso difíciles, pero a el gústalle ver as diferentes visións que poden chegar a crear», relata Rafa. Así que su trabajo fotográfico fue lo que a él personalmente le había sugerido leer el libro de su amigo. Una de las directrices fue fotografíar ciertos paisajes que estaban presentes en las localizaciones de los poemas, como la Ribeira Sacra o las Rías Baixas. A partir de ahí, Rafa creó series de fotografías, como las que actualmente están expuestas en el bar Xarope de Sarria. Son las que muestran los paisajes de mar, realizadas con película y con una visión abstracta, más de la que está acostumbrada a utilizar. «Luis deixábame equivocarme». Así resume Rafa el proceso de creación conjunto. Luis, por su parte, explica que: «A min encántame traballar con amizades, pero con aquelas coas que teño sintonía». No es la primera idea que el escritor tiene de colaboración con sus amistades, ni será la última. «Con descoñecidos é un problema mesturar o afectivo porque pode ser incómodo», explica. En cambio, al trabajar con personas afines, la confianza y la honestidad permiten compartir diferencias y «falar con liberdade». «Se non entendo algunha das súas fotografías ou el algún dos meus textos, podemos falalo e compartilo sen unha mala interpretación do que algún dos dous opina», argumenta Luís. Este trabajo conjunto ha sido un éxito para ambos y esperan poder hacer un libro que incluya la afición de uno y la profesión del otro.