Un incendio calcina dos tractores, maquinaria y hierba en una explotación de Sarria

Lorena García Calvo
Lorena García Calvo SARRIA / LA VOZ

SARRIA

El incendio calcinó dos tractores, otra maquinaria agrícola y la hierba almacenada
El incendio calcinó dos tractores, otra maquinaria agrícola y la hierba almacenada Óscar Cela

Se originó pasadas las ocho y media de la tarde en el lugar de Ferreiros, a donde se desplazaron numerosos efectivos

16 nov 2020 . Actualizado a las 00:56 h.

Pasaban de las 20:30 de la noche del domingo cuando la central del 112 recibió una llamada avisando de un incendio en una explotación ganadera del lugar de Ferreiros, situado a escasos minutos del centro de Sarria. El fuego, que por el momento se desconoce cómo se originó, prendió en la hierba seca que los propietarios almacenaban en una nave abierta por dos laterales, provocando un incendio de grandes dimensiones, pero que por fortuna solo se cobró daños materiales.

El fuego calcinó toda la hierba que estaba almacenada, dos tractores, un autocargador y otra maquinaria agrícola. Hasta el lugar se desplazaron dos camiones de bomberos de Sarria, dos carrocetas de la Xunta, la Policía Local, la Guardia Civil y una unidad del 061, además del alcalde, Claudio Garrido, y algún miembro de la corporación. Dadas las dimensiones del incendio, solicitaron también ayuda a los bomberos de Monforte, que acudieron con otros dos camiones para colaborar en las tareas de extinción.

En la nave en la que se almacenaba la hierba había una quincena de pequeños terneros que en un primer momento soltaron al prado próximo para evitar que los atrapara el fuego. Después entre los vecinos y las fuerzas de seguridad desplazadas los reunieron de nuevo en un lateral cuando la situación se estabilizó. Al lado de la nave se encuentra el establo de las vacas, pero el fuego no le afectó. Tampoco a las granjas de pollos que hay próximas, apenas separadas por un prado.

Nada más comenzar el incendio, numerosos vecinos de la parroquia y familiares acudieron al lugar para intentar ayudar. Varios participaron activamente rociando con cisternas de agua y, cuando fue posible, retirando la hierba y la maquinaria.

A última hora de la noche en la explotación continuaba un importante despliegue, aunque ya estaba controlado el incendio. En ese momento las tareas se centraban en apartar la hierba para el prado para que se consumiese.