Polémica en Sarria por el nuevo uso del terreno de la vieja fábrica de la Feculera

X.M.P. LUGO / LA VOZ

SARRIA

ALBERTO LÓPEZ

El PP acusa al gobierno local de practicar competencia desleal

12 feb 2020 . Actualizado a las 17:53 h.

La posibilidad de dar nuevos usos al barrio sarriano de A Estación genera polémica en la localidad. El PP censura la actitud del gobierno local, ya que, dice, su interés por comprar la nave conocida como la Feculera supone en el fondo competencia desleal con empresas locales. Además, agrega el grupo popular, la viabilidad de la operación es dudosa desde el punto de vista urbanístico, puesto que se trata de suelo de uso industrial.

Los populares aseguran que el interés del gobierno local por ese terreno equivale a atentar claramente contra el futuro de Sarria. Esa consideración se apoya en que, afirma el PP, una empresa de la localidad tenía intención de comprar ese terreno. Así se impide que una empresa pueda crecer, ya que, recalca el grupo popular, es terreno de uso industria en un municipio en donde carece ese tipo de terreno. La empresa que, según el PP, aspiraba a hacerse con esas instalaciones iba a ampliar su plantilla en varias decenas de personas.

En las críticas del PP está también presente el destino que el Concello puede dar a los fondos procedentes de una donación. Se trata de los más de 350.000 euros que un vecino, José Sánchez Arias, cedió al Concello tras haber vendido un piso en Madrid. En la donación, recuerda el PP, se incluye la condición de que el dinero se destinase a actuaciones de índole cultural o benéfica. La negociación realizada por el gobierno local con una entidad bancaria, dirigida a comprar las naves y darles uso cultural, no tiene en cuenta que se trata de terrenos catalogados como de uso industrial.

A esas duras críticas del PP se le añade también el hecho de que el alcalde se ha comportado con oscurantismo. Las naves cuya compra pretende cerrar el Concello tuvieron actividad a mediados del siglo pasado. La abundancia de patatas en la comarca sarriana permitió la fabricación de almidones y glucosas. La ubicación de las instalaciones, de las que aún se conserva la chimenea, no era casual, ya que la cercanía con la estación de ferrocarril permitía la salida de la mercancía.

El PP sostiene, por otra parte, que si el terreno pasase a manos de una empresa se daría más actividad a una zona del casco urbano en la que el deterioro ha crecido últimamente.