Cumplir 100 años deja de ser noticia

tania taboada LUGO / LA VOZ

SARRIA

CEDIDA

Ángela López, Felicitas López y Ermitas Regueiro coincidieron ayer en la celebración de sus cien años de vida

12 nov 2016 . Actualizado a las 21:10 h.

Día de celebración en la residencia Nuestra Señora del Carmen, en Sarria. No era para menos puesto que una de sus residentes cumplía ayer un siglo de vida. Se dice rápido pero alcanzar esta edad es todo un reto. Y más todavía si quien la cumple está como un auténtico roble a pesar del intenso trabajo que desarrolló durante toda la vida. «Andaba un quilómetro carretando unha cesta de nabos na cabeza, un fillo no colo e a outra filla da man», relataba ayer Fidel, uno de los nietos de la centenaria, que recordaba las exquisitas patatas fritas que le preparaba cuando iba a visitarla.

Natal de Lousadela, en Sarria, Ángela López pasó toda la vida en Ronfe, Láncara. De ahí que los regidores de ambas localidades acudiesen, junto a su familia, a felicitarla en persona y obsequiarla con una placa y ramos de flores. Un detalle con el que Ángela no contaba y que vivió con mucha emoción.

Agricultora y costurera

Esta centenaria, que compaginaba los trabajos del campo con los de la costura, se casó con un cantero y carpintero. Construyeron su hogar en Láncara y tuvieron tres hijos. Su marido falleció hace 30 años y ella afrontó la vida en solitario. Tiene además ocho nietos y cinco bisnietos. Hasta los 98 años no supo lo que era un medicamento y comer empanada de carne y pulpo era su mejor fiesta. Sus cumpleaños los celebraba en familia y comiendo fuera. Las almejas a la marinera eran su capricho. Esta centenaria lleva un año y medio en la residencia tras caerse y romper la cadera y el fémur. Su familia optó por el centro para que gozase del mejor cuidado. Un sitio en el que se encuentra feliz y al que todos los días acude su hijo menor para visitarla.