Las familias de refugiados proceden de Homs, una de las ciudades más golpeadas por la guerra
29 jul 2016 . Actualizado a las 08:45 h.Tres de los siete niños de las dos familias sirias de refugiados que viven en Sarria, acudieron por primera vez ayer al pediatra. Fueron por la mañana temprano, acompañados de su madre de y una técnica de Cruz Roja, al centro de salud. Fuentes consultadas señalaron que los pequeños están bien de salud y de peso.
Cruz Roja ya inició los trámites para escolarizar a los niños en el colegio Frei Luis de Granada, que es el centro público de referencia en Sarria. Entregaron la documentación y están a la espera de que les asignen las plazas que les corresponden.
Los dos matrimonios y sus hijos están tratando de adaptarse a su nueva vida. El secretario local de Cruz Roja de Sarria, Jaime Capellá, señaló que han pedido empezar cuanto antes con las clases de español y de hecho, ayer, ya les enseñaron las primeras palabras.
Adaptarse a la nueva vida
Capellá señaló que tanto los adultos como los niños están muy contentos de haberse mudado a vivir a Sarria, se encuentran tranquilos y muy agradecidos de la ayuda que están recibiendo por parte de todos para poder empezar una nueva vida y están deseando adaptarse a sus nuevas circunstancias.
Ayer trascendió que estas dos familias sirias, las primeras que llegaron a la comunidad gallega, proceden de la ciudad Homs, la tercera más grande del país en población y en la que empezaron los combates en el año 2011. Está completamente destruida. Lo que no sabe con exactitud es cuándo huyeron a Líbano y en qué circunstancias iniciaron el éxodo al país vecino de primera acogida.