Críticas a la alcaldesa de Sarria por contratar a María Novo

Xosé Ramón Penoucos Blanco
x. r. penoucos LUGO / LA VOZ

SARRIA

Pilar López dijo que lo hizo por ser una experta en urbanismo y el Partido Popular calificó el caso como «gravísimo»

27 may 2016 . Actualizado a las 17:06 h.

La contratación por parte de la alcaldesa de Sarria de la abogada y exdelegada de Urbanismo de Lugo, María Novo, para defender al Concello sarriano en los dos casos del cierre de dos empresas de As Ínsuas fue el punto más polémico que se trató en el pleno celebrado ayer.

El, portavoz del PP, José Antonio García, consideró que la contratación de la ex integrante del equipo de gobierno dirigido por José López Orozco era un caso «gravísimo y una posible prevaricación, por lo que estudiaremos emprender acciones legales por la contratación de una persona imputada».

José Antonio García preguntó si la regidora había estado ayer por la tarde con Orozco y María Novo en Sarria y le pidió que desvelara el coste del contrato, así como que la contratación había sido por ser «una compañera de partido». También preguntó los motivos por los que por primera vez en 16 años el Concello no recurrió a los servicios gratuitos de la Diputación.

Premura y coste

Pilar López respondió que había recurrido a esta abogada tras recomendársela como «una de las mejores de Galicia en urbanismo». Explicó que el contrato tendría un coste máximo de 7.000 euros y que recurrieron a una abogada externa al no poder atender sus peticiones los de la Diputación por premura de tiempo.

La alcaldesa explicó que María Novo no era compañera de partido al no estar afiliada al PSOE y no tuvo reparos en reconocer que había estado antes del pleno con la letrada y con López Orozco.

El otro punto que suscitó un amplio debate, aunque en este caso bastante más reposado, fue la moción del BNG en la que solicitaban que el subdelegado del Gobierno, Ramón Carballo, fuera nombrado persona non grata por su actuación en las multas por un importe de 16.709 impuestas a los de miembros de la Plataforma Sarriana polo Río durante las protestas por las obras del plan de encauzamiento. «Foi unha represión aos veciños que só defendían a liberdade de expresión», expresó el edil nacionalista Efrén Castro.

La oposición fue unánime al considerar que la medida que presentaba el Bloque era una manera de desviar la atención para que no se hablara de ineficacia en las áreas que dirige. También consideraron que era una decisión desmesurada. Desde el PSOE, Diego López consideró que las multas «fueron desproporcionadas», pero aún así era injusto personificar sobre Ramón Carballo lo sucedido con las sanciones y la actuación policial y por lo tanto los socialistas se abstuvieron en la votación.

Plaza de tesorero

La propuesta de la creación de una plaza de tesorero, que presentó el equipo de gobierno, fue rechazada por la oposición. La alcaldesa explicó que el cambio en el reglamento les obligaba a realizar esa contratación y que no lo hacían por un capricho. La oposición argumentó que no tenía lógica habiendo necesidades importantes en el pueblo que se creara una nueva plaza que es preciso dotar con 60.000 euros.

El rebacheo de Calvo Sotelo recibió las críticas de la oposición. «Escarallaron la calle», manifestó con rotundidad el edil popular Francisco Pérez, a lo que el socialista Diego López le respondió que la obra que realizaran mejoró las condiciones en las que estaba la calle y que tienen previsto llevar a cabo una actuación más completa.

El pleno aprobó que no se atendiera la petición de CESPA que solicitaba 9.782 euros por intereses de demora.