El responsable del negocio de Ribeira de Piquín confía en reanudar el trabajo
22 ene 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La reparación de la piscifactoría de Santalla (Ribeira de Piquín) que se vio gravemente afectada por las consecuencias del Gong en la provincia, se hará previsiblemente en verano. Pedro Yera, responsable de las instalaciones, manifestó ayer que la previsión apuntaba a dejar el negocio sin actividad hasta el período de estiaje, porque cuando el nivel del río esté más bajo, será más fácil evaluar cualquier actuación. «A partir de ahí, calibraremos», dijo.
La rotura del muro de contención, que terminó cediendo ante la crecida del río Eo, se produjo a una profundidad de tres o cuatro metros, mientras que el diámetro de la hendidura causada no se conocía con exactitud. El agua, comentó, «fue horadando, horadando» hasta abrir una brecha.
En la piscifactoría trabajan cuatro personas. Aunque ahora se impone un inevitable período de inactividad, no se descarta que las instalaciones puedan reabrir sus puertas. «Hay posibilidad», afirmó.