La alta demanda genera servicios piratas de taxi para extranjeros que van a O Cebreiro
PEDRAFITA DO CEBREIRO
El Camino es goloso. La afluencia de peregrinos no para de crecer de año en año y cada vez son más los extranjeros que llegan desde todos los rincones del mundo para hacer la ruta. La gran mayoría llegan en avión al aeropuerto de Lavacolla y desde allí utilizan un transporte para desplazarse hasta el punto desde el que van a empezar a caminar, normalmente Pedrafita do Cebreiro, el kilómetro cero del tramo gallego. Ese flujo constante de caminantes hace que en los últimos años haya aflorado el pirateo en el servicio de taxi, un fenómeno que ha motivado un control más exhaustivo de la Guardia Civil de Tráfico.
Los principales perjudicados de estos servicios piratas son los peregrinos, frecuentemente timados con precios abusivos, y los taxistas de Santiago, que por norma general son los únicos que pueden operar en el aeropuerto compostelano. Los de otros puntos de Galicia solo pueden recoger viajeros en Lavacolla si han firmado un contrato con los clientes y se trata de una actividad esporádica. Requisitos que con cada vez más frecuencia se saltan muchos profesionales. Los controles que está haciendo el instituto armado en toda la N-547 han destapado que hay taxistas de otros municipios que han llegado a hacer hasta cinco viajes en el mismo día sin haber cumplido con el papeleo.
Para pasar desapercibidos, hay taxistas que llegan a desmontar las luces del techo que los identifican o a quitar las pegatinas de las puertas. Intentan así que los agentes no se den cuenta de que son profesionales y les den el alto para sancionarles.
Además de los taxistas de otros municipios que operan ilegalmente en Santiago, el poder de atracción del Camino también ha hecho surgir en los últimos años otros servicios de transporte para peregrinos igualmente fuera de la ley. Hay desde alojamientos que ofrecen transporte en furgoneta hasta empresas turísticas que han lanzado servicios de apoyo logístico que incluyen transporte de mochilas y cátering.