Centenares de personas disfrutaron del amplio programa diseñado para la Feira do Ano o de San Isidro en una jornada marcada por el tiempo irregular
16 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Paradela celebró por todo lo alto la 21 edición de la Feira do Ano e Festa de San Isidro. La ilusión de los asistentes y el amplio y atractivo programa diseñado por los organizadores, el Concello y Adespa superó a la amenaza de mal tiempo y centenares de personas se acercaron a la localidad para disfrutar de la jornada.
La apertura del mercado ganadero fue el primer acto y el recinto se convirtió en uno de los lugares más concurridos del certamen. Los toros de Acruga y algunos ejemplares selectos de rubia gallega fueron los principales atractivos para los curiosos.
Otro acto que congregó a centenares de personas fue el sorteo de numerosos regalos en el centro sociocultural. Entre los obsequios había de todo, desde ruedas de coche hasta lavadoras o neveras. Resultó curioso ver como algunos afortunados recogían sus premios y pensaban en la manera en la que los llevarían a casa.
La cita con el pulpo también fue de las más concurridas. Las casetas registraron una notable afluencia desde media mañana y al mediodía no era sencillo encontrar acomodo en alguna de ellas.
El acto central fue el desfile de carros del país. En esta ocasión hubo dos hechos importantes, el primero que se superó el récord de carros participantes. Hasta la fecha nunca habían pasado de cinco y ayer desfilaron siete. La otra novedad es que uno de ellos estaba tirado por una pareja de bueyes auténtica.
La que no pasó desapercibida fue la ausencia del alcalde, José Manuel Mato, quien muy a su pesar no pudo estar en su localidad justo el día del año en el que más disfruta. Compromisos profesionales le impidieron disfrutar de una gran jornada.
La música de la Nova Charanga de Paradela y la banda animaron la fiesta que concluyó con la degustación y la verbena.