Denuncian a un furtivo por usar sedales durmientes para capturar truchas en el Miño, en Outeiro de Rei

lugo LA VOZ

OUTEIRO DE REI

Agentes medioambientales retiran los aparejos del pescador furtivo
Agentes medioambientales retiran los aparejos del pescador furtivo CEDIDA

Agentes de Medio Ambiente de la Xunta lo descubrieron de noche cuando utilizaba un batuxo para llegar a una zona de difícil acceso

15 may 2022 . Actualizado a las 20:15 h.

Agentes medioambientales de Xunta de Galicia denunciaron a un pescador furtivo que fue sorprendido en el río Miño en Outeiro de Rei utilizando métodos ilegales, en horas no permitidas y en un tramo de pesca sin muerte. Los hechos ocurrieron durante la madrugada del pasado martes 10 de mayo en la isla de San Roque, dentro de la zona de especial conservación Parga-Ladra-Támoga, en un lugar de difícil acceso que solo se puede alcanzar en barca o, cuando el caudal del río es muy bajo, con vadeadores. 

Poco antes de la medianoche, los agentes observaron a una persona cruzando hacia la isla en un batuxo, y dos horas después procedieron a identificarla tras observar como manipulaba los conocidos como sedales durmientes, aparejos con varios anzuelos cebados que se dejan calados durante cierto tiempo en los ríos. En este caso, el denunciado los colocaba en los extremos de unas varas que tenían anzuelo con muerte y estaban cebadas con lombrices para capturar truchas. Clavaba las varas en el suelo para que quedasen sujetas. 

En el momento de la identificación, llevaba tres truchas muertas en la cesta, y al levantar el resto de las varas colocadas encontraron otra muerta y otra con vida, que fue devuelta al río. Los agentes decomisaron las cuatro truchas (de 21, 23, 24 y 25 centímetros de talle), los aparejos de pesca, el batuxo y 40 varas o chuzos, que sacaron de la isla ya por la mañana.