«A cría de cabalo no monte faise de maneira cada vez máis profesional»

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS VILALBA / LA VOZ

MURAS

Un potro en montes de Muras, una zona donde abunda el ganado caballar de monte
Un potro en montes de Muras, una zona donde abunda el ganado caballar de monte MARCOS LOPEZ ALONSO

El número de reses es menor, pero los ganaderos han evolucionado

11 dic 2020 . Actualizado a las 19:53 h.

Tener caballos ya no es lo que era. Eran utilizados en faenas del campo. La desaparición de esos trabajos o la introducción de maquinaria fue marginándolos, y en los últimos tiempos se vive una nueva situación, con cambios en los usos y en los dueños que los crían. La asociación Pura Raza Galega (Puraga) ha ido introduciendo mejoras.

Cotización

Precio en alza en los últimos tiempos.

Antón Vázquez, director técnico de Puraga, comenta que hace unos diez años se pagaba alrededor de 20 euros por un potro de seis meses y de unos 90 kilos. El precio y el poco interés en el mercado de carne llevaron a muchos criadores a dejar de vender; ahora, con un precio algo mayor, se vive, según Vázquez, el curioso fenómeno de que los potros se venden mejor. Puraga veía hace años que su esfuerzo por dignificar este tipo de ganadería resultaba una empresa muy difícil.

Ejemplares

Pocas cabezas, mucha tradición.

Puraga tiene unos 120 socios, que son dueños de unos 1.700 animales. Según cálculos de Vázquez, en los montes de Galicia hay actualmente unas 15.000 cabezas. La cifra es escasa si, por ejemplo, se compara con la de vacas. Buena parte de los criadores de caballos son ganaderos que poseen explotaciones de ganado vacuno de carne y que tienen esa actividad como complemento, afirma Vázquez. En cambio, el arraigo de ferias en las que el caballo es protagonista único o destacado se mantiene.

Circunstancias

Las ayudas comunitarias, decisivas.

Hace años, el número de caballos era uno de los criterios por los que un ganadero podía recibir ayudas de la Política Agraria Común; sin embargo, el terreno dedicado a esas reses no entraba en esas consideraciones, a diferencia de lo que sí ocurría con las vacas. Hubo ganaderos que teniendo en cuenta el número de reses equinas y vacunas y el terreno disponible, decidieron deshacerse de los caballos por temor a perder las ayudas de la PAC, que se conceden según el número de animales (los caballos entraban, como las vacas) y de la superficie (el terreno ocupado por las vacas se tenía en cuenta; el de lo caballos, no).

La necesidad de colocar un chip a los caballos, acordada hace años, también llevó a algunos ganaderos a desentenderse de la situación. Vázquez reconoce que esas dos circunstancias acabaron por provocar un descenso del número de animales. Años después, no se ha logrado volver a las cifras de entonces, aunque la situación sí parece estabilizada. Por otro lado, agrega Vázquez, se espera que en los nuevos criterios de la PAC se introduzca el terreno destinado a caballos, además del número de reses, para la concesión de ayudas.

Evolución

Nuevo perfil de criadores.

El descenso del número de caballos fue acompañado de una disminución del número de criadores. Al mismo tiempo, recalca Vázquez, cambió el perfil de los ganaderos, con menos edad y con otra mentalidad. «Os gandeiros son máis profesionais; os cabalos están mellor coidados; a cría de cabalo de monte faise de maneira cada vez máis profesional», afirma.

Si antes abundaba la cría de caballos fundamentalmente por tradición, ahora hay una apuesta más firme. Las circunstancias enumeradas en párrafos anteriores parecen haber influido: los criadores que continúan asumen que la actividad no siempre proporciona beneficios.

Punto débil

Poco consumo de carne en Galicia.

El consumo de carne de potro es en Galicia menor que en Cataluña o la Comunidad Valenciana, reconoce del responsable de Puraga. Aunque no niega la dificultad de cambiar la situación, cree que se podrían lograr avances. Una posible fórmula sería la promoción de la carne de potro como aliciente vinculado con zonas donde esos animales están presentes.

La Feira do Poldro de Muras, que se celebra a finales de septiembre, incluyó algún año jornadas gastronómicas en el programa de actos; en As Quendas, ferias y fiestas que tienen lugar en Mondoñedo con el 1 de mayo como jornada central, también se preparó algún año degustación de carne de potro.

El mes pasado, en Lugo ciudad, Puraga organizó una degustación; no obstante, las circunstancias sanitarias derivadas de la pandemia impidieron la celebración de la comida que estaba prevista. El restaurante Canedo preparó un menú con diversas elaboraciones de una carne que destaca por su alto contenido en proteínas y por su poca grasa, y los distribuyó en bolsas.