La enemistad entre ambos condicionará los resultados y la posible composición de mayorías
16 may 2015 . Actualizado a las 14:19 h.Si los acontecimientos se desarrollasen con normalidad, Antonio Gato Soengas volvería a revalidar el 24 de mayo su mayoría absoluta en Monterroso. Sería su quinto mandato al frente del consistorio. Entre un PP que aún intenta superar la crisis que provocó su anterior candidato, José Rojo; un BNG que se renueva casi al completo, y «los logros» que fue cosechando Gato estos cuatro años, le valdrían para consolidarse. Pero en los últimos meses surgió un actor imprevisto, Jesús Otero, antiguo subdelegado del Gobierno, quien una vez sacado de sus espaldas el lastre del caso de la retirada de multas (aún a expensas del fallo del Tribunal Supremo) sondeó la posibilidad de encabezar la lista del PSOE. Al ver que se le cerraron las puertas desde el partido de su vida -aunque un poco molesto por lo que considera falta de apoyos en los últimos años- Otero decidió presentarse.
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¿Gato será alcalde si no obtiene la mayoría?
Lo tiene muy difícil, aunque de este veterano y curtido político todo se puede esperar. Personas que le conocen bien apuntan que en las últimas semanas está muy nervioso. Sabe que si quiere ser alcalde va a necesitar de la mayoría porque un pacto con Otero o el PP, a día de hoy, es inviable. Solo una carambola, poco probable con el BNG, le daría la oportunidad de repetir como regidor por quinta vez consecutiva. Estos días de campaña, Gato se vuelca como nunca, con apoyos desde la dirección provincial del PSOE (Besteiro se juega un diputado provincial). Tampoco falta el asfaltado de calles y pistas. Sus enemigos, que son muchos tras pasar tantos años al frente del consistorio, le acusan de controlador, de incumplir promesas personales y de que «o estás con el ou contra el». Su trabajo le avala, especialmente en el ámbito social, con logros como la residencia, el centro de día, la guardería, escuelas deportivas, servicio de comida a domicilio o ayuda en el hogar. Socialismo puro.
independentes terras do asma (INTA)
¿Será cierta la encuesta que les da la mayoría absoluta?
Jesús Otero y los integrantes de su lista se han encargado de anunciar por toda la villa que han hecho una encuesta y les otorga la mayoría absoluta. ¿Es un farol? Eso se verá. Lo que sí se sabe es que Otero, siempre reconocido «por ser boa persoa», se ha encargado de hacer una lista «gañadora», integrada por exmilitantes del PSOE, del PP y del BNG, incluido el actual edil nacionalista, Marcelino Vázquez, o la que fue secretaria local y número dos del PSOE, Rosa Moscoso. Una lista de antiguos colaboradores y amigos de Gato. Familias enfrentadas. Amigos rotos. «Unha lista para facer dano», señalan en la villa, y no solo en el sentido de restar votos a Gato sino que muchos socialistas le echan en cara a Otero «a súa deslealdade». Otero tiene claro que nunca pactará con el PSOE liderado por Gato, incluso con algunos de la lista que acompaña al actual alcalde. Otero y Gato son enemigos desde hace lustros. Incluso, los partidarios del regidor siempre señalaron al exsubdelegado del Gobierno como instigador del grupo que se opuso al Plan Especial do Casco Histórico de Monterroso, que estaba elaborando el Concello.
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¿Comparsas en un enfrentamiento entre familias socialistas?
La crisis que abrió el anterior candidato, José Rojo, cuando dejó tirado al PP a los pocos meses de tomar posesión como concejal (quiso ser diputado provincial y el partido optó por el palense Fernando Pensado) obligó a la entonces concejal y ahora candidata, Pilar Varela, a tomar las riendas del partido en Monterroso. Su jefe de partido, José Manuel Barreiro, vinculado también a Monterroso, decidió confiar en ella, como agradecimiento por el «papelón» que le tocó lidiar con la marcha de Rojo y la crisis en el grupo municipal. Desde el PP destacan su compromiso con el partido «e por ser unha muller traballadora, cercana e humilde». Los 1.060 votos que obtuvo el PP en el 2011 difícilmente los tendrá este año. La presencia de Otero, el desgaste general del PP y el recuerdo de la crisis interna este mandato pesará en los electores. Aun así, en Monterroso, como en buena parte del interior de la provincia hay un voto fiel popular.
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¿Podrán entrar en la corporación?
Los 280 votos del 2011 le permitieron al BNG entrar en la corporación. Tras las fuga de Martínez con Otero, el BNG presenta a Xoán Carlos Paderne, que encabeza una lista casi renovada. Las posibilidades de repetir serían bastante lógicas si no hubiese un nuevo partido con aspiraciones de gobierno. Su programa es claro, «democratización do Concello e transparencia».
escenario político de monterroso ante las elecciones municipales
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PSOE (6), PP (4) y BNG (1)
A por su quinto mandato con sus fieles en la listaDe ir en la lista de Gato a solventar la crisis internaCampaña puerta a puerta para darse a conocerSer alcalde de Monterroso es su gran ilusión
Es un histórico del socialismo lucense. Nacido hace 70 años, es diplomado en Magisterio y licenciado en Derecho por la UNED. Entró en 1973 en el socialismo en el partido de Tierno Galván. Fue diputado autonómico de 1981 a 1997 y portavoz socialista en la Diputación. En amor a Monterroso nadie le gana. Es un prototipo de alcalde como Francisco Vázquez o Abel Caballero, que antepone Monterroso a los intereses del partido. Ha sido el primero en «denunciar» a la Xunta por falta de atención al municipio y al día siguiente en destacar el apoyo del gobierno popular en otra materia. Se presenta a estos comicios con su equipo, que le ha acompañado estos cuatro años.
El partido y Barreiro confían en ella. Le reconocen su lealtad al PP cuando se produjo la crisis de Rojo y su equipo, en el que estaba ella. Aunque amagó con irse, recapacitó y tomó el control del grupo municipal para hacer oposición a Gato. Ahora se presenta con una lista renovada en sus primeros puestos e intentando olvidar a crisis del 2012. Tiene 39 años y es educadora de la escuela infantil de Chantada, además de experta docente informática en el centro penitenciario de Monterroso. Su bagaje en la política es amplio, hasta el punto de que llegó a ir en la primera lista de Gato Soengas en el año 1999, aunque no salió elegida concejala.
El cabeza de lista del BNG -Asambleas Abertas tiene 37 años, es comercial de profesión y con orígenes en la parroquia monterrosina de Lodoso. Se marca como objetivo no solo conseguir representación municipal, sino también «buscar a democratización no concello para abrilo aos veciños e para rematar coa falla de transparencia que sofrimos a diario». La campaña que desarrolla estos días Paderne es puerta por puerta, no solo para presentar sus propuestas, sino para darse a conocer tras la marcha del actual edil del Bloque a la lista de Otero. La lista que acompaña a Paderne es casi renovada. Solo repiten dos personas de los once de hace cuatro años.
Un histórico del socialistas y de la UGT de Lugo, siempre vinculado con la enseñanza, ocupando plaza en diferentes centros de la provincia, en ellos en Monterroso, donde fue director del instituto, cargo que también ocupó en el Leiras Pulpeiro de Lugo. Suso, como le conocen sus amigos, tiene fama de ser una persona querida. Para muchos, esa afabilidad le arrastró al conflicto de las multas desde su cargo de subdelegado del Gobierno. Esta operación acabó con su carrera política (hay quien lo veía como el sustituto de Orozco) y pasó al ostracismo político. Ahora resurge y lo tiene claro, quiere ser alcalde de su pueblo, una vieja aspiración.
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