La policía desmonta en Lugo un botellón en la orilla del Miño con altavoces, luces, tiendas de campaña y parrillas alimentadas con butano
LUGO CIUDAD
Los agentes dejaron registro de todos los elementos que estaban usando los investigados. La denuncia afecta a varias normativas por la zona protegida en la que se celebró la fiesta
29 ago 2024 . Actualizado a las 11:58 h.La Policía Local de Lugo informó este jueves de una intervención muy poco habitual en la ciudad. El cuerpo municipal publicó su parte de incidencias, en el que destaca un operativo que tuvo lugar en la orilla del río Miño, a la altura del merendero, el pasado sábado. Según el informe, los agentes desmantelaron una gran fiesta, que incluía música a todo volumen, alcohol y una infraestructura digna de cualquier negocio del sector del ocio.
El parte municipal deja registro de lo que se encontraron los policías al llegar al lugar, un punto adyacente al Camiño de Vilar. Varios vecinos de esa calle reclamaron la presencia de los agentes denunciando un ruido desmesurado procedente de la zona del merendero del Miño.
Una importante infraestructura
Los policías, nada más llegar, se encontraron con una escena inusual. Varias personas participaban en una fiesta en la que había un disyóquey con una mesa de mezclas, altavoces, luces de alta potencia, una parrilla alimentada por una bombona de butano, mesas, sillas, una tienda de campaña que bloqueaba el paseo y una batería de un coche que aportaba energía eléctrica a toda la infraestructura.
Al observar todas estas irregularidades, muchas de ellas imprudencias que podían ocasionar un grave incidente en una zona boscosa adyacente al río, los agentes identificaron al promotor de la fiesta. Según el parte, fue denunciado por instalar todos estos elementos de manera ilegal. Además, fue propuesto para sanción por infringir normativas de la Xunta y de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, ya que la celebración entrañaba un riesgo de incendio en pleno verano. También fue denunciado por incumplir la Lei de Protección da Seguridade Cidadá, ya que la mañana siguiente todos los elementos seguían en el mismo lugar a pesar de la orden de la policía de que debía retirarlo y dejar limpia la zona.
Los agentes desalojaron a los participantes en la fiesta, muchos de ellos bajo los efectos del alcohol, y obligaron al organizador a cesar esta actividad.