Así funcionará en Lugo el contenedor marrón: tarjetas para depositar la basura y un contrato menor para gestionarlo

Lorena García Calvo
Lorena García Calvo LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

Una mujer utilizando el contenedor marrón.
Una mujer utilizando el contenedor marrón. CAPOTILLO

El Concello estima que empezará a implantarlo a principios del próximo año, cuando concluya el reparto de cubos en el rural y lleguen los chips que necesitan

30 nov 2023 . Actualizado a las 11:54 h.

El contenedor marrón, reservado para los llamados biorresiduos, empezará a implantarse en el concello de Lugo a principios del 2024. Dicho contenedor está pensado para los restos de comida cruda o cocinada, las espinas de pescado o marisco, los huesos, los restos de frutas o verduras, las cáscaras de huevo y las cortezas del queso, pero también para papel de cocina y servilletas ya usadas, los corchos y palillos y los restos de pequeñas plantas y césped.

La llamada Ley de Residuos y Suelos Contaminados obliga a la recogida separada y estableció el 31 de diciembre de este año como fecha límite para que funcionase dicho contenedor. Sin embargo, en Lugo se retrasará unas semanas por la falta de chips que llevarán incorporados los colectores de carga lateral y porque primero acabarán de instalarse los contenedores del rural.

La red marrón estará integrada por contenedores de carga lateral y composteros individuales y colectivos. La instalación de los contenedores de carga lateral marrones comenzará a principios de año y serán 100 los que se distribuirán. Se trata de colectores con apertura electrónica con tarjeta y 1.800 litros de capacidad. Estos son los que ahora mismo están a la espera de que se suministren los chips, por falta de abastecimiento.

Además, se instalarán 800 composteros individuales en la zona rural, 4 composteros colectivos que se situarán estratégicamente en la zona urbana y 400 composteros de 220 litros ideados par los llamados grandes generadores. Es decir, para empresas que quieran adherirse a la red.

Según explican desde el área de Trasición Ecolóxica, encargada de la materia, ya hay algunas empresas que se han mostrado interesadas en sumarse a esa red, y a como a lo largo del próximo año se llevará a cabo una campaña de captación, se prevé que se incremente el interés.

«A instalación de toda esta nova infraestrutura vainos permitir incorporar un novo ciclo de reciclaxe que vai contribuír dunha forma importante a conservar o noso medio e a mellorar na sustentabilidad do noso municipio», explica Miguel Fernández, concejal de Transición Ecolóxica.

El problema es que los contenedores de carga lateral con apertura electrónica llevan incorporados chips que no han llegado todavía. El Ayuntamiento está a la espera del suministro de estos dispositivos para empezar a implantar la red en todo el municipio.

La estimación de Transición Ecolóxica es que a medida que esté avanzada la implantación de los contenedores nuevos en la zona rural (empieza estos días y se colocarán unos 125 por semana), se pueda empezar con los marrones. Se calcula que dentro de unas 10 o 12 semanas.

Tarjetas para abrir

Para asegurarse de que los usuarios utilizan correctamente este contenedor y no arrojan dentro otros residuos, el Concello decidió que funcionarán con una tarjeta electrónica que permitirá abrirlos y depositar allí los restos, reduciendo así la posibilidad de que los usuarios hagan un mal uso. Esta tarjeta tendrá dos modalidades. O bien la Tarxeta Cidadá, a cuyos dispositivos se incorporará un chip; o bien una tarjeta específica que se les facilitará en el servicio LuceLugo.

Además, la gestión de este tipo de residuos, que no estaba contemplada en el contrato de basura, se hará, al menos por el momento, con un contrato menor.