Productos naturales para el cabello: «Con todo lo que sé, no volvería a ser peluquera tradicional»
LUGO CIUDAD

En Lugo hay pocas peluquerías orgánicas, pero es un servicio que poco a poco se consolida al ofrecer un tratamiento saludable sin químicos
28 ago 2023 . Actualizado a las 21:37 h.Lo orgánico y lo natural cada vez está más demandando por los lucenses, pero es una tendencia que mayoritariamente se aplica a la alimentación y no tanto al cuidado del cabello o la piel. Las peluquerías orgánicas ofrecen una alternativa a los salones convencionales donde se emplean productos químicos que muchas veces pueden resultar agresivos con la salud capilar y dermatológica.
Que una peluquería sea «orgánica» implica que los productos empleados estén elaborados naturalmente y de forma ecológica, además de que sean amigables con el medio ambiente y que respeten la integridad del cabello.
En Lugo, uno de los establecimientos con esta filosofía es Ledicia Bio, una peluquería ubicada desde hace un año en la Praza de Ferrol. Carmen, su propietaria, lleva en el sector 37 años, aunque solo ocho con la filosofía orgánica. Comenzó su recorrido en Outeiro de Rei abriendo la primera peluquería de Galicia con estas características. «Venía mucha gente de todos lados, pero me cambié a Lugo porque necesitaba espacio para elaborar mi propia cosmética», señala la lucense. Además de ofrecer servicio de peinado y tinte, también crea sus propios productos: «Me considero incluso más una artesana».

«Lo fundamental es eliminar la química utilizando lo que nos da la naturaleza», destaca. Carmen comenta que cuando sus clientes prueban sus productos «ya no hay vuelta atrás» por los buenos resultados que les ofrecen. «Yo empecé haciendo el jabón para mi porque todo me picaba ya que estaba lleno de perfumes sintéticos, de conservantes, de química... Con todo lo que sé no volvería a ser peluquera tradicional», manifiesta la peluquera. También hace especial hincapié en que cuando el cabello está sano no se necesitan demasiados tratamientos, solo lavarlo e hidratarlo, algo que repercutirá de forma positiva también en la salud y en el medio ambiente.
«Muchas enfermedades de piel se deben a todos los productos que se utilizan porque la piel absorbe todo»
Carmen elabora champú, acondicionadores, jabón artesanal para el cuidado de la piel, mascarillas y mantecas para nutrir el cabello, además de coloración orgánica: «La elaboro a partir de pigmentos que consigo fuera porque no se cultivan, los he ido recopilando de Asia y de África». Los champús se hacen en formato sólido para evitar el uso de envases de plástico y una pastilla en Ledicia Bio cuesta 10 euros pudiendo durar hasta 3 meses dependiendo del número de lavados, a pesar de que grandes marcas con su publicidad encaren su precio en el mercado. «No es más caro, solo hay que saber como y donde comprar», destaca.
Aunque Carmen considera que la ciudad de Lugo es más lenta en adaptarse a esta filosofía en comparación con otras, gracias al boca a boca cada vez son más los que prueban los beneficios de una cosmética orgánica. Esta opinión también la comparte Ana, de la peluquería Moana. La profesional lleva más de 20 años en el sector, pero justo antes de la pandemia decidió unirse a esta filosofía abriendo un local en la Rúa Bispo Aguirre, donde muchas de sus clientas habituales se unieron al cambio.

«Antes de abrir el salón estuve dos años testando y viendo si realmente era posible abrir una peluquería más saludable, y sí que es lo es», comenta Ana. Para ella fue un «antes y un después» incluso en su propia salud, ya que ella y sus 5 compañeras se pasaban muchas horas inhalando los gases tóxicos de los productos.
«La mayor ventaja es la salud, porque no te la quita»
En Moana disponen de productos 100% naturales y otros con química, aunque no es tóxica ni nociva como la de productos convencionales, ya que consideran no todos los procesos se pueden conseguir con productos orgánicos porque es más limitado. «Por desgracia mucha gente viene a nuestra peluquería porque empieza a tener alergias o problemas de sensibilidad a los tintes después de años de acumulación de químicos», resalta. Ana también señala que normalmente este tipo de servicios los solicitan personas con problemas o enfermedades oncológicas, ya que estos productos son totalmente compatibles con la quimioterapia.
El año pasado Moana decidió crear su propia marca, aunque por el momento es limitada, ya que se trata de una línea de champús sólidos: «Hice cursos y formación porque tenía muchas ganas de tener un producto propio, pero para hacer todo lo que utilizamos ya es más complejo». No todos los locales fabrican sus productos, otras como RG Estilistas los compran para poder emplearlos con sus clientes.

Pilar lleva un año en Lugo, pero más de 30 en el sector de belleza y compara los numerosos beneficios de, por ejemplo, los tintes orgánicos con respecto a los tradicionales: «El tinte no rompe la barrera proteica, por lo que no altera el pigmento del cabello, el cuero cabelludo no pica ni se irrita, además de que no deja el cabello opaco en color, quedando flexible y brillante». De momento la madrileña considera que es algo desconocido en la ciudad, pero espera que cada vez los lucenses opten por un tratamiento natural en su cabello.