Así se derribará el Garañón de Lugo: plumas de demolición y mucha gestión de residuos para una mole de 37.396 metros cúbicos
LUGO CIUDAD
El Concello remitió este viernes a la Xunta la solicitud de la autorización y ahora está a expensas del permiso de Patrimonio
18 mar 2023 . Actualizado a las 19:58 h.El Concello de Lugo registró este viernes ante la Dirección Xeral de Patrimonio la solicitud de la autorización para demoler el polémico edificio Garañón. En cuanto la Xunta le dé el visto bueno —tiene hasta tres meses para pronunciarse—, la intención del gobierno local es comenzar los trabajos de demolición. . En estos momentos, lo único que podría retrasar el derribo (además de la tardanza en el visto bueno autonómico) sería si el Banco Santander sigue interponiendo medidas cautelares ante el juzgado, aunque ya se las han rechazado en dos ocasiones.
El Concello remitió a la Xunta el proyecto de demolición en cuanto lo tuvo perfilado. El Consello de Patrimonio se reúne el último viernes de cada mes, por lo que podría entrar ya en la próxima sesión o en la siguiente, dado que parece tiempo suficiente para ver el proyecto de reposición de la legalidad. Desde el Ayuntamiento sostienen que los trabajos de demolición no van a afectar en nada a los elementos que están dentro del ámbito de protección del BIC, es decir, que no lo altera en absoluto, por lo que lo lógico sería que le diesen el visto bueno pronto.
Así será la demolición
La friolera de 37.796,49 metros cúbicos es el volumen total que se demolerá en O Garañón (14.868 metros cuadrados de superficies construidas). La empresa Xestión Ambiental de Contratas fue la adjudicataria del contrato y su plan para derribar un edificio símbolo del feísmo es picando, como ya se hizo en la vieja Residencia. Se hará con plumas y máquinas industriales poco a poco hasta reponer la legalidad en una estructura integrada por dos torres. El llamado volumen nordeste tiene nueve plantas sobre rasante y el noroeste diez sobre la rasante de la cota más baja.
El primer paso será anular las acometidas y eliminar el aislamiento de los techos de forjados del bloque nordeste. Luego se eliminarán las fábricas de ladrillo de las fachadas al tiempo que se quita el aislamiento de la torre nordeste. A continuación comenzará la eliminación del material que aísla las fachadas y los techos de forjados del bloque noroeste, y seguidamente, se irán eliminando pórtico a pórtico en sentido descendente.
La demolición del edificio se detendrá a la altura del forjado del suelo de la planta baja porque será necesario analizar la estabilidad del muro de contención para garantizar la estabilidad del terreno. La última parte será la de retirada y desescombro de todo el material. Se utilizará la propia parcela para el acopio de los elementos demolidos.
Así se rehabilitará la zona
Pero los trabajos en O Garañón no finalizarán cuando el edificio esté tirado. Las sentencias judiciales obligan a reponer la zona a su estado inicial, es decir, a zona verde, por lo que habrá que adoptar algunas medidas. Para empezar, se cubrirá el fondo de la excavación con una lámina geotextil de manera que no se pueda filtrar al suelo ningún agente contaminante. Luego se aprovecharán todos los materiales de la demolición que no son contaminantes para rellenar la zona, y se dejará la parcela con las cotas que tenían en su día. Se hará acopio de tierra vegetal, se instalará un sistema de riego por aspersión y se extenderá un tepe de césped natural precultivado. Así, en solo unos meses toda la parcela recuperará su estado original.
