El Concello contrata un estudio detallado de la vida en esas calles para luego pedir fondos europeos
28 oct 2022 . Actualizado a las 13:48 h.Rehabilitar y regenerar los barrios de A Milagrosa y Feijoo, en Lugo, es el objetivo que se ha marcado el Concello para recuperar dos zonas que a nivel urbanístico se han ido degradando con el paso de las décadas. Para ello, este viernes la junta de gobierno local aprobó iniciar el proceso para contratar por 101.000 euros un estudio muy pormenorizado que analice a nivel arquitectónico, sociológico, económico y de entramado urbano esas zonas de la ciudad. Una vez se disponga de ese informe, el Ayuntamiento pedirá fondos a la Unión Europea para revitalizar los barrios. Este informe servirá para declarar este espacio Contorna Residencial de Rehabilitación Programada (ERRP), que es el paso previo a pedir las subvenciones.
El barrio de A Milagrosa es, probablemente, el más popular de la ciudad de Lugo. Creció como enclave en el que asentar la numerosa mano de obra que se mudó a la ciudad para trabajar en Frigsa a partir de la década de los 60, y en ese momento se priorizó atender la demanda creciente de pisos, sin prestar atención alguna a cómo sería esa calidad de vida de los habitantes. Con el Barrio Feijoo, uno de los más degradados de la capital provincial, sucedió algo parecido. El resultado es que, a día de hoy, ambas zonas están avejentadas tanto a nivel edificatorio como de servicios y poblacional y corren el riesgo de quedar descolgadas del concepto de ciudad humanizada que persigue la alcaldesa, Lara Méndez.
Partiendo de esta base, y de un estudio básico encargado en su día a una empresa, el Concello ha activado el protocolo para regenerar ambas zonas. «Farémolo dende un punto de vista arquitectónico, promovendo e captando investimento para a recuperación dos inmobles e a mellora da súa eficiencia enerxética pero tamén redeseñando os espazos públicos con proxectos de humanización como a creación dunha senda verde peonil de conexión do conxunto do barrio co centro histórico», explicó Méndez. Para hacerlo, lo primero será hacer un estudio detallado que comprenderá, en el eje sur-norte, desde la Ronda da Muralla a Agro do Rolo; y en el eje oeste-este, desde las Casas Baratas (no estarían incluidas) hasta el Barrio Feijoo.
La empresa que se lleve el contrato tendrá un plazo de nueve meses para analizar al detalle esas dos zonas. A nivel arquitectónico, supone, por ejemplo, que deberán acceder a todas las viviendas para conocer pormenorizadamente cuál es su situación y detallar, exactamente, cuantas unidades edificatorias hay y constatar que al menos la mitad sean residenciales. Debe exponer la cantidad exacta de edificios que serían susceptibles de rehabilitar. Para esta tarea el equipo redactor también mantendrá encuentros con los vecinos o las asociaciones locales. Ha de constatarse también el coste estimado de las intervenciones previstas.
Asimismo, realizará un estudio sociológico de los vecinos que habitan en esas calles, e incluirá también un profundo análisis sobre el entramado urbano. Toda esta información dará pie a que se redacte un proyecto y un cronograma sobre qué se puede hacer para revertir la degradación y reenganchar esas zonas con una ciudad más humanizada a nivel arquitectónico y social. «O estudo debe incluir propostas de actuación xa deseñadas, como poden ser as sendas verdes peonís que conecten os barrios co casco histórico ou a creación de novas prazas e parques infantís», describió la alcaldesa. Todas las conclusiones servirán diseñar también zonas comunes.
Disponer de ese estudio pormenorizado será el que permitirá al Concello elegir qué convocatorias de los fondos Next Generation es la que mejor encaja en las necesidades de los barrios, para así presentarse. A partir de ahí también deberá verse cómo se sustancia la intervención, si ha de ser con iniciativa municipal, privada o compartida, si las líneas que mejor encajan son para ayudas para aislamiento, accesibilidad, interiores... «Non queremos maquillar estas zonas, senón reestructuralas», aseguró el edil de Urbanismo, Álvaro Santos.
