Las prácticas de coche se encarecen en Lugo por la subida del combustible

Lucía Blanco LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

La subida del precio del mantenimiento de la flota también influye en la tarifa de las prácticas.
La subida del precio del mantenimiento de la flota también influye en la tarifa de las prácticas. Carlos Castro

El incremento del importe en el mantenimiento y en la renovación de la flota también afecta a las autoescuelas

28 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

El precio del carburante continúa disparado, un incremento que afecta tanto a particulares como a múltiples profesionales para los que llenar el depósito se convierte en una auténtica pesadilla. Los precios de la gasolina afectan, especialmente, al comercio y a los negocios vinculados al transporte, como los taxistas, las autoescuelas o los autobuses. Una situación que también influye con la llegada del verano en la que los centros de aprendizaje de conducción en Lugo registran una inscripción masiva de jóvenes tras el fin de las clases.

Esta situación es más complicada para las autoescuelas de vehículos pesados, como es el caso de la autoescuela Europa ya que «un camión gasta unos 30 litros de gasóleo por cada 100 kilómetros», explica el dueño, Juan Taboada. En su negocio, el gasto de combustible se incrementó un 70%, lo que supone que en una práctica de conducción en la que «normalmente se gastaban unos 10 euros de gasoil, ahora se gastan unos 15», añade. En esta autoescuela, las tarifas para el permiso B pasaron de unos 24,50 euros a unos 25, ya que intentaron mantener los precios lo más ajustados posible. Sin embargo, reconocen que no es una decisión que puedan sostener a largo plazo.

Dificultad para renovar la flota

A estas problemáticas se le suma el incremento del importe en la compra de nuevos vehículos «que han subido en los últimos años un 35%», denuncia Taboada. «Antes comprabas turismos con descuentos para autoescuelas por unos 12.000 euros, hoy el mismo coche está en unos 18.000 euros». Incluir los componentes electrónicos de seguridad, como sistemas de frenado automáticos o el control de estabilidad, para adaptarse a la normativa, justifican que el importe ascienda.

La suba de las tarifas afecta directamente a los usuarios, a los que «non podes incrementar toda a diferencia que se está producindo co combustible porque sabes que os clientes se están retraendo», explica José Manuel Santos, propietario de la autoescuela Alborada. En ella, ya están notando que hay menos demanda frente al verano pasado.

«O combustible vale o dobre do que valía, se antes enchías o depósito con 35 euros, agora son 78». Esto implica que para los que quieren sacarse el permiso de conducir, cada clase práctica cuesta unos dos euros más con respecto al año pasado. Desde Alborada ofrecen sesiones fuera de la ciudad, por lo que las tarifas fluctúan entre los 27 y los 28 euros. Además de que el precio de los coches, que «están agora mesmo inalcanzables», dificulta la renovación la flota, la manutención del vehículo también se incrementa. «As horas de taller, os neumáticos ou o aceite están moito máis caros do que estaban antes», destaca Santos.

En Tú Autoescuela debido a la subida de precios, el gasto mensual por combustible se ha incrementado en unos 1.200 euros. Por lo que se han visto obligado a aumentar la tarifa de las prácticas, que se sitúa en los 25,50 euros. «Desde a pandemia tivemos que incrementar un par de euros para intentar compensar, aínda que intentamos mantelo todo o posible para que non repercuta no cliente», explica José Montes, director del centro de conducción.

Combustibles alternativos

La situación obliga a plantearse otras opciones como «optar por combustibles alternativos como o gas licuado, aínda que non podes cambiar a flota toda, polo que estamos a espera». De hecho, aunque lo habitual es renovar los coches cada tres años, este proceso también conlleva dificultades, debido a que los plazos de entrega son «moi longos para algún tipo de vehículos». Los eléctricos también podrían ser una opción, pero «veñen todos con cambio automático, así que tampouco podemos recurrir a eles porque se o alumno se examina dese xeito, só lle darían o permiso para o automático».

Aunque el periodo estival es el de mayor actividad para el sector, notan que «a xente se retrae no permiso de conducir». Por lo que Montes, como presidente de la Asociación Gallega de Autoescuelas, asegura que «haberá negocios que o van a pasar moi mal e chegarán ao peche, porque o verán é a época de maior bonanza, e se se producen baixas repercuten ao longo do ano».