La abstención del PP deja sin aprobar el 5 % pendiente del PXOM de Lugo

Lorena García Calvo
Lorena García Calvo LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

La abstención del PP dejó el 5 % del PXOM de Lugo sin aprobar
La abstención del PP dejó el 5 % del PXOM de Lugo sin aprobar Alberto López

El documento volverá a debatirse en otro pleno extraordinario, el día 23, cuando se espera que salga adelante, ya que está consensuado entre Concello y Xunta

17 jun 2022 . Actualizado a las 19:27 h.

El Partido Popular no iba de farol. La aprobación del 5 % pendiente del Plan Xeral de Lugo deberá esperar, al menos, hasta el día 23 de este mes, que será cuando el pleno, en una otra sesión extraordinaria, volverá a debatir un documento que este viernes no salió adelante. Para aprobar el texto y remitirlo a la Xunta para su información final, era necesaria una mayoría de 13 votos en la corporación, pero el PSOE se quedó solo con sus ocho concejales. El PP, sosteniendo el pulso que inició el jueves, se abstuvo y, por lo tanto, el documento no se validó, puesto que el BNG votó en contra, como había adelantado, y los dos concejales de Ciudadanos también se abstuvieron. 

Por primera vez en mucho tiempo, los 25 concejales del Ayuntamiento de Lugo coincidieron en una sesión plenaria. El único punto del orden del día era la aprobación de las modificaciones hechas al 5 % pendiente del PXOM

El edil de Urbanismo, Álvaro Santos, fue el encargado, en su regreso, de defender el texto. Lo hizo recordando que se trataba de un texto consensuado entre Concello y Xunta de Galicia y resaltando su importancia para dar seguridad jurídica a todas las zonas que se mantienen en el limbo. Reconoció, además que el actual PXOM estaba ya obsoleto, tras once años de vigencia, pero manifestó que sería «inxusto» avanzar en un nuevo texto sin primero ordenar lo pendiente. 

Cuando llegó el turno de Ciudadanos, Juan Vidal-Pardo calificó de «obsoleto» el texto actual y dijo que debería estar trabajándose en uno nuevo ya, igual que con el Pepri, avanzando que se abstendrían. 

El BNG, en el momento de votar no al texto del PXOM
El BNG, en el momento de votar no al texto del PXOM Alberto López

En cuanto al BNG, Rubén Arroxo tomó la palabra para recordar que quienes habían aprobado el texto en el 2011 ya ni estaban en la corporación y que, aunque las modificaciones subsanan parte de los defectos que veían, seguían sin poder apoyar un PXOM con el que no comulgaban desde su inicio. 

Fue entonces cuando llegó el turno del PP. El viceportavoz, Antonio Ameijide, tomó la palabra reivindicando que «nadie puede negar la buena voluntad del PP de Lugo, este no es un buen PXOM, pero es mejor que no tener nada, pero no pueden pedirnos un cheque en blanco», dijo al grupo de gobierno. Volvió a pedir un aplazamiento de la votación para poder estudiar con detenimiento el escrito. «Solo le pedimos tiempo, hasta el día 30 para estudiar el documento, y humildad para reconocer que no tiene apoyos suficientes». Y avanzó que no intervendría más en el pleno. 

Fue entonces cuando Álvaro Santos apeló a que estaban ante un trámite «puramente administrativo. Non ten carga ideolóxica, que esa iría na aprobacion inicial, senón que é algo que plasmaron os técnicos. E, sen este trámite, non pode haber unha aprobación definitiva». Incluso apeló al trabajo hecho por los técnicos, especialmente el coordinador de Urbanismo, el interventor Manuel López, y la directora xeral de Ordenación do Territorio, la popular Encarna Rivas. Pero ni así. «Supoño que é predicar no deserto, pero pido altura de miras», acabó por decir. 

Con los respectivos argumentos sobre la mesa, tomó la palabra la alcaldesa. Lo primero que hizo Méndez fue pedir al secretario que indicase si se había seguido el procedimiento ordinario a la hora de facilitar al documentación a la oposición, y este dijo que si. Se votó entonces si debía aplazarse o no la aprobación, y el PP se quedó solo en su petición. 

Llegaba la hora de la verdad, pero Méndez hizo un último intento. «Podemos compartir que este PXOM non se adapta xa, pero é necesario finalizalo para seguir modificándoo e, mentres, aportar seguridade xurídica», dijo. E insistió en la colaboración Concello-Xunta a la hora de redactar el texto, ya aprobado inicialmente en el 2020. 

Fue entonces cuando tocó levantar la mano y el PSOE se quedó solo en su intento de aprobar EL 5 % del Plan Xeral que está en el limbo desde el año 2011. El PP, manteniendo el pulso, se abstuvo, igual que Cs, mientras el BNG votó directamente que no, algo que la oposición le había recriminado durante el debate. El documento volverá a someterse a votación en el pleno ordinario del día 30, y para entonces todo apunta a que saldrá adelante. Durante estos días, el PP lo estudiará a fondo. 

Los socialistas fueron los únicos que votaron que sí
Los socialistas fueron los únicos que votaron que sí Alberto López

Los unos responsabilizan a los otros

Tras la sesión plenaria, unos y otros valoraron lo sucedido. «A nosa posición sempre foi clara, se este PXOM chegou ata aquí, foi grazas ao PP. Se ten once anos de retraso é culpa de quen gobernou o Concello durante este tempo. Non se lle pode pedir máis responsabilidade ao PP cando se ve que neste último paso o PSOE está sobrado de soberbia. O que tiñan era que falar con nós, deixarnos tempo suficiente para estudalo. Nós somos os máis interesados e os que demos o apoio ao plan, pero non podemos permitir esta prepotencia. Eles son 13, contando ao BNG e non son capaces de poñerse de acordo», razonaba Ramón Carballo tras la sesión.

El portavoz de los populares lucenses dijo que si en estos días comprueban que el texto se adapta a lo recomendado por la Xunta, votarán que sí el día 23, y está seguro de que su decisión se comprenderá en la calle. «Nós cos sectores afectados xa falamos e vano entender perfectamente. Non se trata de facer ruído, senón de demostrar a capacidade deste goberno. Xa dixemos que mentres non nos dera tempo a estudalo, non o iamos apoiar, e mantemos a palabra», abundó. Además, Carballo cree que las costuras del gobierno de coalición «xa se viron ao longo do mandato».

La sorpresa de la alcaldesa

La reacción del PSOE a la abstención popular fue de «sorpresa» en palabras de Lara Méndez, «porque o groso do documento aprobouse no ano 2020 cos votos do PP, polo que coñecen o expediente. Ese mesmo outubro a Xunta fíxonos unhas esixencias para poder aprobalo definitivamente e o que se fixo neste ano foi consensuar coa Xunta este documento, atendendo esas esixencias, para poder levar as cuestións puramente técnicas á aprobación definitiva. O que parece estar cuestionando o PP son as esixencias da Xunta, porque o groso aprobouse no 2020».

Méndez insistió en que el PP podía haber accedido a la documentación telemática antes de la comisión y que, igual que le ofrecieron posponer un par de horas esta, podrían haberla movido a otro día y, así, retrasar el pleno.

«Foi un pleno revelador», definió, y aquí metió tanto a oposición como a BNG. «O sentido dos votos reflicte á perfección que intereses defende cada partido». En todo caso, cargó especialmente contra el PP, a los que acusó de «darlle as costas ás e aos residentes nos 70 núcleos do rural que agardaban polo seu voto para poder construír unha vivenda ou poñer en marcha o seu medio de vida. Veñen de frear, unha vez máis, o desenvolvemento empresarial deste concello».