Del radar de la avenida Infanta Elena de Lugo ya no queda ni la caja

André Siso Zapata
André S. Zapata LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

La empresa adjudicataria retiró la caja del radar de la avenida Infanta Elena para proceder a su sustitución
La empresa adjudicataria retiró la caja del radar de la avenida Infanta Elena para proceder a su sustitución Alberto López

El Concello afirma que fue retirado temporalmente para ser reparado. Casi un mes y medio después de un asalto vandálico, tres de los cinco dispositivos del municipio siguen fuera de servicio

27 abr 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Casi un mes y medio después de haber sufrido un acto vandálico organizado, tres de los cinco radares del municipio de Lugo siguen fuera de servicio. Dos de esos tres continúan a la vista de todos los lucenses, con los cristales destrozados, pero uno de ellos ha desaparecido completamente. Y es que del radar de la avenida Infanta Elena, que mantenía a los conductores por debajo de los 50 kilómetros por hora en una de las arterias de la ciudad amurallada, no queda ni la caja.

Fue este pasado fin de semana cuando muchos usuarios de la vía se sorprendieron al no ver el dispositivo, que llevaba años instalado entre los carriles de la avenida y que limitaba la velocidad a 50 km/h. Algunos incluso insinuaron que se procedería a su retirada definitiva, ya que la cámara del radar rota entre ese dispositivo y el ubicado en la avenida de Madrid, y sugerían que pasaría a colocarse de forma permanente en este último. 

Sin embargo, fue el propio Concello el que desmintió esta versión. Este martes, el gabinete de prensa del BNG de Lugo, encargado de la concejalía de Mobilidade e Transporte y responsable de los radares, afirmó a La Voz que el radar volverá a la avenida en los próximos días.

Según el Gobierno local, fue la empresa que posee la concesión de los radares la responsable de haber arrancado la caja. En estos momentos se encuentra en un proceso de reparación, ya que la compañía analizó los daños y concluyó que no se podría arreglar in situ. Por lo tanto, estará un tiempo en un taller especializado.

No se sabe con certeza lo que ocurrirá finalmente, pero el Concello avanza que el dispositivo volverá a su lugar «nuns días». Queda por conocer si será la misma caja tras beneficiarse de una reparación, si será un contenedor completamente nuevo o si se sustituirán solo las piezas dañadas. 

La caja estaba completamente inservible, por lo que se optó por su retirada temporal. Los otros dos radares dañados y que continúan fuera de servicio, ubicados en la Avenida de Madrid y en la Ronda da Muralla a la altura de la Porta Miñá, continúan en su lugar, y no hay previsiones de que sean retirados. Es cierto que sufrieron un daño menor, ya que solamente les rompieron el cristal y no la caja entera, como le ocurrió al de la avenida Infanta Elena. 

El único radar que ha sido devuelto a su rendimiento normal es el ubicado en la N-VI. Este dispositivo es propiedad del Estado, y la subdelegación del Gobierno confirmó que ya está plenamente operativo. Sigue funcionando también el radar de titularidad municipal situado frente a la delegación de la Xunta, que se salvó del vandalismo. Por el momento, el Concello no pone fecha a la vuelta a la actividad de los tres radares que siguen fuera de servicio.

El Concello recuerda a los ciudadanos, eso sí, que la Policía Local y la Guardia Civil siguen llevando a cabo controles de velocidad con radares móviles en todo el entorno de la ciudad.