Santo Domingo, la Praza do Ferrol o la rúa Montevideo lucirán su nueva imagen en el 2024
08 abr 2022 . Actualizado a las 17:05 h.En el casco histórico de Lugo solo el 15 % está sin peatonalizar. Por ahora. El Concello de Lugo acometerá su transformación con cargo a los fondos europeos Next Generation, y antes de que finalice el 2024 todo el interior del recinto histórico lucirá su nueva imagen.
La alcaldesa, Lara Méndez, acompañada del delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, presentó este viernes el anteproyecto de peatonalización, que abarca por un lado la Praza de Santo Domingo y la Rúa do Teatro, y por el otro la zona que comprende entre Bispo Odoario y la Praza do Ferrol, y que comprende las calles Bolaño Rivadeneira, Ramón y Cajal, Amor Meilán y Montevideo. El coste total del proyecto ascenderá a 5,9 millones de euros, de los que 4,4 llegarán de la partida europea.
Para concretar los proyectos de peatonalización, el Concello, a través de un estudio de arquitectura, elaboró un análisis previo que recoge cuestiones vinculadas al tráfico. El estudio refleja que los vehículos que transitan por estas calles rondan los 37.000 a la semana y emiten una media de 409,7 toneladas de C02 al año. De ellas, el 62 % de las emisiones se centran en las calles de la zona de la Praza de Ferrol y Montevideo, y el 38 % restante a Santo Domingo y Teatro. El reto del Concello es reducir estas emisiones al 40 %, puesto que todo el casco histórico será la zona de bajas emisiones de la ciudad.
Aunque toda la zona se peatonalizará, como hasta ahora, los residentes, los repartidores y las personas que acuden a los párkings podrán seguir accediendo.
Praza de Ferrol, Montevideo, Quiroga Ballesteros, Bolaño Rivadeneira, Amor Meilán y San Fernando
En esta zona hay una serie de condicionantes ligados a las tres puertas de la Muralla afectadas, Bispo Odoario, Porta Falsa y San Fernando. La circulación rodada accede desde Bispo Odoario y sale por San Fernando, es la zona de conexión principal con la zona norte y el acceso al centro.
Lo que se pretende es favorecer la limitada circulación en un único sentido, entrando por Bispo Odoario para proseguir por las calles Montevideo, Bolaño Rivadeneira, calle Porta Falsa y saliendo por la puerta de San Fernando. Con esto, se elimina el tramo de circulación delante del cuartel de San Fernando para darle más valor al edificio y a la iglesia de San Froilán.
Solo habrá un tramo de doble sentido, desde la puerta de Bispo Odoario a la calle Ramón y Cajal, para dar acceso al aparcamiento de Vía Romana. Así, se eliminan unos 600 vehículos que se mueven hacia esa zona. El resto del tráfico, residentes y mercancías se distribuye por Quiroga, Amor Meilán y San Froilán.
En esta zona, la idea es poner en valor el cuartel de San Fernando y la iglesia de San Froilán, para ello el pavimento se colocará teniendo en cuenta la orientación de los edificios. Delante del cuartel se retira el tráfico rodado y plantean colocar una gran escultura.
Habrá equipamientos y se fomentarán las zonas verdes. En la parte posterior de la iglesia, los macizos ajardinados se reconvertirán en zonas para estancias y habrá la posibilidad de instalar terrazas. Delante del centro de salud se amplía el espacio para canalizar el flujo de peatones hacia la Porta Falsa. La fuente de San Fernando y la escultura en homenaje a la enfermería se trasladarán frente a la iglesia.
En cuanto a las calles Bolaño Rivadeneira, Montevideo, Quiroga Ballesteros y Amor Meilán, el objetivo del Concello a nivel urbanístico es diferencia espacios por medio del arbolado y por su disposición. Con la diferenciación del arbolado se intentará distinguir también los distintos períodos históricos de la zona.
En el tramo de Quiroga Ballesteros pendiente se contempla mayor densidad de arbolado y se reservarán zonas de carga y descarga entre ellos. En Amor Meilán se colocarán los camelios ubicados hoy en Santo Domingo.
Todo el pavimento será como plataforma única, con peatones y vehículos compartiendo espacio, y se contempla también que puedan instalarse terrazas. Junto a la medianera del Xoán Montes se plantará el Ginkgo Biloba que hay hoy en Santo Domingo.
En esta intervención se dará prioridad a la Rúa Nova, que se reivindicará como vía principal, siendo resaltada.
Praza de Santo Domingo y Rúa do Teatro
En este tramo, la idea es reducir la circulación al mínimo, con acceso solo para residentes, mercancías y los párkings. Aquí habrá un único sentido de circulación tanto en Quiroga Ballesteros como en la propia plaza, y se hará en diagonal para mantener la plaza.
En esta intervención, el monumento bimilenario se trasladará para estar enfrente de la Rúa da Raíña, favoreciendo la simetría de la zona. La plaza tendrá dos zonas diferenciadas, la alta y la baja, con ambientes diferenciados y en los que los edificios singulares se resaltarán. Aquí también se contempla la posibilidad de ubicar terrazas.
Las distintas intervenciones incluirán bancos, papeleras y demás mobiliario urbano.
En cuanto a las fechas, la previsión del Concello es que antes de finales de año esté licitada toda la intervención para concluir las obras antes de que concluya el 2024, ya que este es el límite que ha marcado la Unión Europea.
El anteproyecto presentado todavía deja en el aire algunas cuestiones, como concretar la zonas de carga y descarga. Los autores del anteproyecto avanzan que en Santo Domingo solo quedará una zona para la parada de taxis, mientras que para las empresas de distribución consideran que lo idóneo sería habilitar espacios fuera de ese ambiente, en las zonas próximas.
Todo el proyecto de peatonalización pretende, en palabras de Lara Méndez, «mellorar a calidade de vida da veciñanza, pero tamén a proxectamos para destacar e por en valor a beleza e a relevancia dos elementos arquitectónicos, escultóricos e históricos máis emblemáticos e impulsando os espazos públicos para un maior uso dos mesmos co fin de enchelos de vida con áreas de estancia, ocio e lecer diferentes, e potenciando os usos comerciais e hostaleiros para dinamizar social e economicamente o casco histórico».
