El desvío de la N-6 por Pedrafita, un viaje de 10 minutos por el pasado

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

Tráfico de camiones circulando por el centro de Pedrafita
Tráfico de camiones circulando por el centro de Pedrafita ALBERTO LÓPEZ

El corte de la A-6 en la montaña lucense vuelve a llenar el centro de la villa de camiones y turismos

02 nov 2021 . Actualizado a las 10:28 h.

Desde este julio los vecinos de Pedrafita do Cebreiro han retrocedido al siglo XX. Todo el tráfico de la A-6 con destino A Coruña ha tenido que ser desviado antes de llegar al límite entre Lugo y León por la N-6 en un trayecto de siete kilómetros y unos 10 minutos de viaje (dependiendo de si hay más o menos tráfico pesado) por la carretera nacional y atravesando la villa de la montaña lucense.

No se han producido grandes complicaciones en el tráfico, salvo en momentos puntuales de alta densidad, sobre todo los viernes por la tarde-noche y los lunes por la mañana, además del pasado puente del Pilar, cuando se llegaron a ver en determinados momentos largas colas de vehículos. Los conductores se ven afectados por el corte de la autovía, con una circulación más lenta, especialmente los turismos que tienen que subir Pedrafita al paso lento de los camiones.

Quienes sí han notado para bien el incremento de vehículos han sido los negocios de la villa, desde la estación de servicio que ha visto como crecieron sus clientes, hasta los restaurantes, bares, panaderías y demás comercios. También el área de descanso habilitada junto al desvío para coger la carretera a O Cebreiro y Triacastela se ha llenado de camioneros que ante el obligado paso por Pedrafita aprovechan para descansar, comer e incluso dormir.

Por el momento, el desvío de una gran parte del tráfico de la A-6 (el que va en sentido Madrid utiliza un carril de la autovía) no está causando graves incidencias en la vida diaria de los vecinos de Pedrafita, que durante décadas sí vivieron el trasiego de miles de coches y camiones atravesando el centro, dejando por un lado importantes beneficios económicos pero a la vez peligros en la seguridad vial.

Para hacernos una idea de la dimensión del cambio que está suponiendo en estos momentos el corte de la A-6 en Pedrafita, en el año 2019, según los datos que maneja el Ministerio de Transportes, circulaban por la N-6 por la villa unos 400 vehículos, 20 de ellos camiones. En cambio, por el túnel de San Pedro, en Pedrafita, hace dos años transitaban casi 9.000 vehículos diarios, un tercio de ellos camiones y articulados.

Tráfico de camiones circulando por el centro de Pedrafita
Tráfico de camiones circulando por el centro de Pedrafita ALBERTO LÓPEZ

La decisión de que no permitir el paso de grandes tráileres por el actual desvío de la N-6 minimiza los daños en cuanto a la seguridad vial y las molestias a los vecinos de Pedrafita, así como evita que se ralentice el paso del tráfico. Aun así, los grandes vehículos articulados —se les desvía por la N-120 por O Barco para luego coger el corredor hacia Nadela— no podrían maniobrar en las glorietas de entrada y salida de Pedrafita. Que no puedan pasar este tipo de camiones sí está generando problemas a algunas empresas, como LM, de Ponferrada, que usaba la A-6 para llevar sus palas de aerogeneradores hasta el puerto de Ferrol.

Desde hace cinco años la Unidad de Carreteras de Lugo acomete importantes y millonarios trabajos de rehabilitación de los viaductos de la montaña lucense y berciana, por lo que la circulación por la A-6 se ha visto interrumpida desde el 2016. Los trabajos de reforma en los puentes de Noceda y Silvela (As Nogais) y los de Ruitelán, Las Lamas y ahora O Castro (todo en Vega de Valcarce) han obligado a cortes de varios kilómetros y a que los tiempos de viaje se hayan visto alterados.

Cómo son los actuales cortes

En la actualidad, los conductores que circulan en sentido A Coruña siguen teniendo la velocidad limitada a 80 por hora desde la salida de Vega de Valcarce, en el kilómetro 420. A la altura del 426 se encuentra el desvío que se habilitó para entrar en la N-6 . El trazado de la nacional es bueno, con dos zonas con carril de adelantamiento, aunque también curvas con limitación a 60. Para aumentar la seguridad, Carreteras cortó el carril de bajada en sentido Madrid.

El tráfico de la A-6 sentido Madrid se hace por un solo carril por el lado contrario al habitual
El tráfico de la A-6 sentido Madrid se hace por un solo carril por el lado contrario al habitual ALBERTO LÓPEZ

Los conductores tienen que atravesar Pedrafita, con limitación de 50 por hora y con varias glorietas (entre ellas la que conecta con la carretera de O Cebreiro) y vuelven a coger la autovía en el kilómetro 432. En total son 12 kilómetros de desvío que pueden llegar a durar diez minutos. Un viaje por el pasado más reciente de las infraestructuras lucenses que por el momento se hace de manera cómoda. La llegada del invierno y las previsibles nevadas y heladas serán una prueba importante para el gran despliegue de seguridad que ha montado Carreteras de Lugo y la DGT.

Por su parte, la circulación en sentido Madrid ya se limita en el kilómetro 433, a la salida del túnel de San Pedro. Los vehículos son desviados por un solo carril y en sentido contrario, atravesando el largo túnel de Pedrafita y con limitación siempre de 60 por hora, hasta que vuelven a incorporarse a la circulación habitual en el kilómetro 427.