Lugo merece respeto y precisa compensación para romper su aislamiento ferroviario

Xosé Carlos Fernández (ingeniero) LUGO

LUGO CIUDAD

Un tren saliendo del túnel de Oural
Un tren saliendo del túnel de Oural ALBERTO LÓPEZ

El ingeniero Xosé Carlos Fernández vuelve a proponer que se haga un tren a Santiago y a A Mariña

17 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando toda la población de capital y provincia de Lugo, sin diferencia de color partidista, coinciden en el aislamiento que sufre Lugo respecto a las comunicaciones ferroviarias con la Meseta y con el resto de la Galicia norte y atlántica, no es de recibo por parte de su ciudadanía, que la Diputación Provincial y el Ayuntamiento de la capital, como Administraciones locales más significativas, permanezcan en silencio ante el pitorreo y desprecio que el Ministerio de Transportes acaba de infligir a la provincia.

Hace unos días contestó por escrito en el Congreso de los Diputados a las demandas de mejora de las comunicaciones ferroviarias entre Lugo y el Eje Atlántico, con «una respuesta sobre otra línea diferente», que evidencia la dejadez y el abandono en que están sumidos las necesidades y el interés de los lucenses. Probablemente un becario ha redactado la contestación a las razonadas propuestas de algunos diputados provinciales.

Llueve sobre mojado, cuando dos importantes personajes lucenses del mismo ministerio se encargan de engañar a Lugo con una, cuantitativamente falsa promesa de inversión, en su línea de acceso a Ourense y Madrid que, salvo la electrificación parcial, solo comprende sanear el trazado actual y restituir las características de operatividad y seguridad de la línea, tras décadas de abandono y obsolescencia, obras que no permitirán reducir sensiblemente los tiempos de viaje entre Lugo y Ourense y por tanto a Madrid. 

Curtis-Ordes

Por ello, las fuerzas vivas de la provincia, lideradas por su capital, deben solicitar y urgir al Ministerio de Transportes que ponga a Lugo en el mapa ferroviario español y gallego. Ya he expuesto en este mismo medio de comunicación, que Lugo tiene fácil y en su mano, revertir esta atávica y frustrante situación de cenicienta del transporte ferroviario de Galicia.

Una línea ferroviaria mixta, de velocidad alta (240 Km/h), electrificada, prácticamente recta y llana, entre Curtis y Ordes/Sigüeiro, de unos 35 kilómetros de longitud, que permitiría alcanzar

Santiago en 50 minutos (40 si se moderniza la línea de A Coruña), y Vigo en 1 hora y 40 minutos (incluso hora y media), es totalmente competitiva con otros medios de transporte (incluso autopista).

El posible trazado arrancaría en una pequeña variante al sur de Curtis desciende desde los 540 metros a los 240 de la antigua estación de Oroso, con una suave pendiente del 1 %, por terrenos prácticamente llanos de los concellos de Mesía, Frades, Ordes y Oroso. Tierras de baja densidad poblacional y con escasas corrientes fluviales que minimizan las obras a un pequeño viaducto y algún túnel de escasa longitud, con lo que 300 millones serían suficientes en el peor de los casos.

Por ello no hay razón, ni debe haber perdón, para que las entidades provinciales públicas y privadas, así como los representantes políticos de nivel autonómico y estatal, no se unan y soliciten ya al Ministerio de Transportes la licitación del preceptivo estudio informativo, gasto menor de 500.000 euros, que ponga de manifiesto lo que en este artículo se propone.

Lugo no debe seguir perdiendo el tiempo, ni aceptando como inevitables los designios de un ministerio que le ha abandonado a la hora de la llegada de la alta velocidad, y que no le considera ni a la hora de responder con responsabilidad y respeto a cuestiones que marcarán el futuro de la competitividad provincial, pero también al derecho de todos los lucenses de viajar con las mismas facilidades y confort que el resto de ciudadanos españoles. 

Xosé Carlos Fernández es ingeniero técnico de obras públicas