Las barracas del San Froilán peligran de nuevo: «O montamos todos o ninguno»
LUGO CIUDAD
Un grupo de feriantes acudió este mediodía al Concello de Lugo reclamando que les permitan instalarse y avisan que si no les dejan no habrá atracciones
01 oct 2021 . Actualizado a las 16:22 h.La calma duró poco. Una docena de feriantes se presentó este mediodía en el Concello de Lugo para reclamar al gobierno local que les dejen montar sus puestos. Se trata de propietarios de negocios de garrapiñadas, patatas fritas, algodón de azúcar, castañas y perritos que habitualmente ocupaban las casetas que instalaba el Ayuntamiento. Según explican, este año no se montarán esos stands y al no haberlos el Concello no les deja montar su negocio, aunque ellos disponen de remolques propios.
«Somos diez familias. Como no han montado los puestos en los que nos colocábamos, nos dicen que no podemos montar. Nosotros tenemos remolques y podríamos funcionar, pero nos dicen que no por estética», explica uno de los afectados.
Pero, según dicen, hay más problemas. «Si no estuviste en el año 2019 no te dejan instalarte, sin embargo hay casos de parentesco en los que sí y otra gente que vino toda la vida a la que no se lo permiten. A mayores, tenemos un desconocimiento total de cómo instalarnos, tenemos que montar todo y no nos dicen nada», se quejan.
Ante esta situación, lo que aseguran es que «o montamos todos o no montamos ninguno, ni los puestos de alimentación ni las barracas». Esta tarde el presidente de los feriantes españoles, Ángel Gutiérrez, tiene prevista una reunión con la alcaldesa en la que precisamente esperan aclarar estas cuestiones. Los feriantes que esta mañana acudieron al Ayuntamiento aguardan que les den una solución.
En días pasados, el Concello ya había señalado que podrían estar los puestos del 2019 que tuviesen la documentación al día y la presentasen adecuadamente. También aclaró al alcaldesa que puestos como los de garrapiñadas sí podrían instalarse.
Policía local vigilando
En el concello no quieren que lo sucedido la semana pasada, cuando decenas de feriantes irrumpieron en el Ayuntamiento, se vuelva a repetir. Nada más presentarse los feriantes ante la casa consistorial, dos patrullas de la Policía Local se personaron para asegurarse de que todo fluyese con tranquilidad. En esta ocasión no se generó ninguna tangana.
