Alquilar plantas está de moda en Galicia

LUGO CIUDAD

Desde el Vivero O Piñeiro en Pontevedra, con 25 años de experiencia en el sector, recomiendan la gran variedad de especies que allí cultivan, según el evento a decorar.
Desde el Vivero O Piñeiro en Pontevedra, con 25 años de experiencia en el sector, recomiendan la gran variedad de especies que allí cultivan, según el evento a decorar. Ramón Leiro

Para bodas, bautizos o ferias. En Galicia está creciendo la demanda de este servicio, concretamente de arbustos, olivos y palmeras, que son los preferidos para decorar. Viveros de Pontevedra, Lugo y A Coruña nos descubren por qué la gente prefiere alquilar que comprar

28 ago 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Que sí, es tendencia. Sea cual sea el evento, lo que se estila ahora es decorar con plantas en estado natural. Pero, como casi todo en Galicia, depende. En este caso, de la celebración, la temporada del arbusto y también del ambiente que se desee recrear. La oferta se ha vuelto rentable tanto para el bolsillo de los clientes como para los dueños de los cultivos y talleres, que las reutilizan en un par de eventos más, siempre que regresen en óptimas condiciones. Y así ocurre en los viveros O Piñero de Pontevedra y Xardigal de Lugo, que durante más de una década se han dedicado al cultivo y comercialización de una gran variedad de plantas. «Las alquilamos ya sea para la decoración de carpas o exposiciones en ferias, dependiendo del evento, del espacio y de lo que busque el cliente. Por ejemplo, para una boda metimos carballos en una iglesia, porque querían darle un aspecto natural a la celebración, y de la planta colgamos otras flores para dar un toque de color, quedó muy original», cuenta Venancio Outeda, gerente de O Piñero, al tiempo que agrega que utilizan determinados ejemplares para dar el aspecto de que estás en un espacio nuevo, llevando sobre todo plantas hechas y no jóvenes. «Por ejemplo, para el salón del brindis de otra boda, alquilamos árboles grandes que dieron la sensación de celebrarla en un bosque y no en una carpa», apunta. Según el experto, si el evento dura varias jornadas, del vivero se envía personal cada dos días para realizar el mantenimiento mínimo del riego de la planta. «Lo normal es que quienes las alquilan se ocupen de regarlas. Se les da unas nociones básicas de cuánta agua lleva cada especie, en función de la época del año, y una vez acabado el tiempo del servicio regresan al vivero y se vuelven a utilizar para otro evento, porque aquí ya las mantenemos con una correcta poda, riego y abono necesario», concluye Venancio.

Para empresas y desfiles 

La nueva tendencia ha despertado el interés de grandes empresas y marcas a nivel nacional, que apuestan por promocionar sus productos recreados en ambientes naturales alquilados. Una experiencia que también cuenta el dueño de O Piñeiro. «Recientemente, una empresa de ropa llegó hasta aquí para grabar el lanzamiento de su nueva colección en una finca que acondicionamos. Buscaban un ambiente natural y apostaron por la variedad que tenemos en nuestro vivero, esto ha sido muy bueno para nosotros». Por otro lado, la empresa de decoraciones florales Concept Decoración, en Madrid, combina el alquiler de plantas vivas y artificiales debido a que ciertas especies no se cultivan en determinadas época del año. «En este sentido, Galicia tiene ventaja, ya que tiene mejor clima. Pero cuando utilizamos las naturales, recurrimos a las más duraderas. Por ejemplo, a las palmeras kentia, las arbustivas como la ficus benjamina y a las variedades de dracenas o helechos, explica Luis Cuadrado, responsable de eventos de la corporación. Y añade que la demanda del alquiler frente a la compra cada vez es mayor, porque generalmente los eventos -señala- no suelen durar más de 7 días. «Hemos realizado de todo tipo, desde la presentación de un coche, el lanzamiento de una bebida o la decoración de ferias, bodas y pasarelas de moda», indica.

El vivero Xardigal en Lugo cuenta con una exposición de unos dos mil metros cuadrados de plantas de interior y exterior. Desde el 2007 se dedican, además,  al alquiler de plantas.
El vivero Xardigal en Lugo cuenta con una exposición de unos dos mil metros cuadrados de plantas de interior y exterior. Desde el 2007 se dedican, además, al alquiler de plantas. ALBERTO LÓPEZ

De momento, los olivos captan la atención de los clientes y son los más demandados tanto en los viveros de O Piñeiro como en los centros de jardinería de Xardigal, en Lugo. Hasta allí llegan los interesados y se los llevan como pan caliente para matizar sus celebraciones. «A partir de mayo hasta finales del verano es la época donde más plantas alquilamos, y los olivos son los que más gustan en esta zona - apunta Jose López, propietario de la instalación lucense-. Si es en primavera, entre las más solicitadas están las camelias, azaleas y rododendros, que las alquilamos también para comuniones, bautizos, bodas y exposiciones». De igual manera, Venancio Outeda añade que han adornado con bosques de olivos áreas del centro de una ciudad. «Decoramos varias plazas con olivos y palmeras, porque así nos lo pidieron. No hay una planta determinada para una ocasión, más bien se adaptan a la temática, al espacio o a lo que se quiera conseguir», concluye.

En el taller AI! CARMIÑA en A Coruña realizan arreglos florales y alquilan diversas plantas a gusto de los clientes, exclusivamente para bodas.
En el taller AI! CARMIÑA en A Coruña realizan arreglos florales y alquilan diversas plantas a gusto de los clientes, exclusivamente para bodas. VÍTOR MEJUTO

Y precisamente, son también los olivos, unos de los ejemplares que más se alquilan en el taller floral Ai! Carmiña en A Coruña, desde que abrió sus puertas en el 2017. Según su dueña, Elena Naveiras, en el mundo de las bodas la solicitud de las plantas va también con las tendencias. «Es así, al principio se pedían muchas especies tropicales y ahora nos piden árboles grandes, frutales, olivos o liquidámbar. Y según el gusto de los novios, si quieren unos cerezos para colgar de una estructura, también se los alquilamos. A los novios les resulta muy rentable, porque el coste para un evento de este tipo se puede reducir a la mitad. Luego, cuando las plantas regresan al taller, las ponemos a la venta o las reutilizamos para otra fiesta si están sanas, porque en estas celebraciones se estropean bastante dependiendo dónde se coloquen, y también porque el calor les afecta. Tenemos gran demanda», apunta. Sin duda, alquilar plantas está de moda. Y todo indica que llega para quedarse.