El edificio de madera que crece en Lugo con nuevas capas y despertando interés

Capa a capa. Así va creciendo, en Lugo ciudad, el edificio del Impulso Verde, una construcción considerada emblemática por el Concello en su apuesta por un urbanismo sostenible. El gran protagonismo otorgado a materiales como la madera, empleada para la estructura del inmueble, es uno de los rasgos destacados de la iniciativa, incluida en el programa Lugo Life + Biodinámico, con el que el Concello lucense prevé crear un barrio multiecológico en las afueras del casco urbano.

Si la madera de pino radiata, procedente de Galicia y poseedora de un sello de calidad, supuso un rasgo novedoso de la construcción, la forma en que se colocó dentro de la estructura, con un sistema similar al de un puzle y con unas características que permitían agilidad en la instalación, también llamó la atención.

 Aislamiento

Un material que no se quema.

En estos momentos, en el edificio se está colocando un revestimiento sobre la madera, que actuará como aislante. Se emplea lana de roca, un material que es parecido a una esponja y que no se quema. Va coloca en rectángulos que se ponen entre los listones de madera. Uno de los detalles de esta operación es que debe hacerse cuando no llueve: el arquitecto Beni Jáuregui, director de obra, explica que se trata de un material poco consistente, que se estropearía si ahora se mojase. Ese material llevará además otras láminas por fuera, semejantes a un producto sintético. Una parte de cada lámina, aproximadamente unos diez centímetros, va colocada sobre la otra.

  Otros materiales

Castaño, aluminio y pizarra.

Por fuera de la lámina se colocan listones de castaño. Cada uno tiene ocho centímetros de ancho y cinco centímetros de fondo. Sobre esos rastreles de castaño irán unos listones de aluminio, dispuestos de manera horizontal y colocados cada 15 centímetros. Por encima del aluminio -del que ya se ha colocado una parte, detalla Jáuregui- se pondrá la pizarra, que se instalará de un modo similar al de las láminas: cada losa tendrá una pequeña parte, alrededor de unos cinco centímetros, sobre otra. «Es un edificio que va en capas sucesivas», explica el arquitecto. En la fachada sur del edificio ya se han colocado algunos cristales.

 Avance

Cerca del 50 % de ejecución.

En estos momentos se está a punto de llegar al 50 % de la ejecución de la obra. Los materiales y la forma de colocarlos no solo suponen una novedad sino también un reto, aunque Jáuregui subraya que el proyecto está bien definido. La construcción se adjudicó a la empresa Egoin en un millón y medio de euros.

Curiosidad

Visitas a los trabajos.

El edificio, que consta de planta baja y de tres pisos, será autosuficiente desde el punto de vista energético, pues en la cubierta tendrá unas placas fotovoltaicas. El Concello lo dedicará a servicios municipales e instalará además una zona para emprendedores. Esta apuesta por la biodiversidad aplicada a la arquitectura despierta interés dentro y fuera de la ciudad, y alumnos del campus de Lugo han realizado alguna visita a las obras, según desvela Jáuregui.

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