El regreso de las ciudades al rural de Lugo es una realidad

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

Jason y Judith, una pareja de norteamericanos que se instaló el pasado año en una aldea de Palas de Rei
Jason y Judith, una pareja de norteamericanos que se instaló el pasado año en una aldea de Palas de Rei ALBERTO LÓPEZ

Los municipios rurales salieron beneficiados de una de las movilidades de residencia más altas del siglo XXI

17 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La pandemia del coronavirus está cambiando hábitos sociales asentados desde las últimas décadas. Dentro de uno o dos lustros se podrá analizar el impacto que tuvieron en la economía y en la sociedad. Pero aun así, en solo un año de pandemia, ya se constatan en la provincia de Lugo modificaciones demográficas que alteran el movimiento poblacional más o menos establecido desde que comenzó el siglo XXI: inmigración interior de las aldeas a la capital de provincia, llegada de inmigrantes extranjeros, y emigración y retorno de jóvenes del exterior, con balances significativos dependiendo de si fue una etapa expansiva en lo económico (período 2003-2008) o regresiva por la crisis (2009-2016). 

más altas que bajas

Mucha movilidad en plena crisis del covid. Según los datos que presentó el Instituto Nacional de Estadística (INE) este martes sobre variaciones residenciales durante el pasado año, en la provincia de Lugo se produjeron 11.380 altas en los cambios de residencia, de los que 9.596 fueron de censados en España y 1.784 llegaron del extranjero; mientras que las bajas alcanzaron la cifra de 9.303, siendo 8.635 residentes en España y 668 extranjeros. Con estos datos, la variación anual fue positiva, de 2.077. Para hacernos una idea de que estamos ante un año atípico en lo que llevamos de siglo solo hubo tres anualidades con una diferencia tan grande entre altas y bajas, y se correspondió a los años de bonanza económica: 2006 (2.097), 2007 (2.665) y 2008 (2.201). A partir del 2009 fueron decreciendo las variaciones residenciales, llegando incluso a ser negativas en el 2014, con 527 más bajas que altas. 

pérdida de población en la capital lucense

Se van nacionales, llegan extranjeros. Tanta movilidad de residencia en la provincia y su saldo positivo tuvo el contrapunto en la capital lucense, que antes de la pandemia iba como un tiro camino de alcanzar los cien mil habitantes pero que por las bajas en el censo tendrá que esperar para poder llegar a esa cifra mágica. El cambio de residencia o de municipio censal ha marcado el 2020 para Lugo, con 2.756 altas y 2.949 bajas. Y eso que hubo dos factores que han ayudado a paliar la caída de lucenses empadronados. Por una parte, el saldo positivo de la continua llegada de extranjeros a la ciudad. Hasta 2.108 personas que residían en España se dieron de alta en domicilios de Lugo y 648 del extranjero; frente a la marcha de 2.786 de «nacionales» y de solo 163 extranjeros. Hubo un segundo factor que pudo fijar población y fueron las ayudas que el Concello otorgó a las empresas y familias más afectadas por la pandemia, y que estaban vinculadas a que los perceptores estuviesen empadronados.

los cambios de residencia por meses

Un otoño muy movido. Si se analizan los cambios de movilidad en la provincia en función de los meses la radiografía de lo que sucedió durante el 2020 está muy clara. Los primeros meses del pasado año las cifras de altas y de bajas en la provincia estuvieron a la par, con los evidentes pocos cambios de vivienda que se produjeron en los meses más duros del confinamiento, especialmente en abril, donde hubo 127 bajas de domicilio y 156 altas. Ambas son cifras ridículas comparadas con otras anualidades en esos meses. Pero es a partir de mayo cuando empieza la desescalada, cuando comienzan de verdad los cambios de domicilio, con saldo positivo para la provincia lucense. Lo que estuvieron anunciando las inmobiliarias como una tendencia se acabó convirtiendo en una realidad: el regreso de personas a municipios más pequeños, especialmente cercanos a capitales o cabeceras de comarca. Lo vivido durante el confinamiento provocó que numerosas personas valorasen la opción de buscar un piso o una casa en municipios con menos restricciones, y pensando en la posibilidad de que en el futuro continuasen las limitaciones y los efectos negativos de la pandemia. Solo así se puede entender que mientras en octubre y en noviembre se produjeron 847 y 1.084 bajas de domicilio; hubo 1.046 y 1.260 altas, respectivamente. También julio fue un mes de grandes diferencias, con 856 bajas y 1.014 altas de residencia. 

radiografía de los que se dieron de alta en lugo

Casi 3.000 personas de capitales de provincia. En el 2020 se produjeron 9.596 cambios de residencia en Lugo procedentes de cualquier punto de España, a los que hay que sumar los 1.784 que vinieron del extranjero. Al menos la mitad fueron movimientos de censados en la misma provincia, con 4.625 lucenses que cambiaron de domicilio, y 4.971 que llegaron de fuera de Lugo, 3.913 españoles y 1.058 extranjeros. De ese total, 2.990 personas cambiaron su residencia procedentes de capitales de provincia. De otros lugares de España, destacan que se censaron en la provincia lucense 314 asturianos, 306 barceloneses, 674 coruñeses, 363 madrileños, 194 ourensanos, 255 pontevedreses y 115 leoneses. Y por tramos de edad, entre 35 y 44 años hubo 1.936 personas que se cambiaron el domicilio en alguno de los 67 concellos de la provincia, seguido de 1.841 entre 25 y 34 años y 1.483 de más de 65 años. En cuanto al sexo, cambiaron de vivienda para Lugo 4.682 hombres y 4.914 mujeres. 

radiografía de los que se dieron de baja en lugo

Más de mil a A Coruña. En el 2020 hasta 8.635 personas que residían en la provincia cambiaron de domicilio, además de 668 del extranjero. Hasta 1.196 se censaron en municipios coruñeses, 327 en Asturias, 228 en Castilla y León, 353 en Ourense, 448 en Pontevedra, 364 en Madrid y 272 en Cataluña, como lugares más destacados. En cuanto a los tramos por edades, es entre 25 y 34, con 1.869, donde más cambios de casa se produjeron, seguido de entre 35 y 44, con 1.779. Por sexo, fueron 4.226 hombres y 4.409 mujeres. 

María José Gómez, alcaldesa de Guntín
María José Gómez, alcaldesa de Guntín ALBERTO LÓPEZ

Friol o Guntín, municipios que crecen y aumenta la natalidad

El crecimiento de la población vinculado a la ciudad de Lugo estuvo centrado en Outeiro de Rei y Rábade, en parte por el efecto de la A-6 y el polígono de O Ceao. Pero la pandemia ha supuesto un oportunidad para revertir una tendencia negativa en la población de otros municipios de la periferia, como Friol y Guntín.

«Durante o confinamento empadroouse moita xente nova en Guntín, o que nos permitiu pechar o ano cun saldo de poboación similar entre altas e baixas», explica la alcaldesa, María José Gómez. «Chegounos moito lucense que ten a segunda vivenda en Guntín, pero tamén parellas novas que están rehabilitando casas para vivir. Ata tivemos durante a pandemia aumento de natalidade co nacemento de seis nenos», señala la regidora popular. Gómez también destaca que la población que ya vivía antes del covid en Guntín no se ha marchado y percibe un movimiento de población que desde hace muchos años no se vivía en el municipio.

María José Gómez, alcaldesa de Guntín: «As fins de semana hai moita máis xente, hai demanda de vivenda e persoas que herdaron casas as están a rehabilitar»

Un caso parecido es el de Friol, aunque en este municipio la tendencia positiva de su población se venía notando desde el 2019. El desarrollo del polígono industrial, que hoy tiene lista de espera, sirvió de impulso, pero ha sido durante la pandemia cuando el crecimiento se ha notado hasta tal punto de que la población de Friol se incrementó en 101 personas (hubo 211 nuevas altas). Desde el 2006, en plena expansión económica, Friol no tenía un saldo positivo.

José Ángel Santos, alcalde de Friol
José Ángel Santos, alcalde de Friol

El alcalde, el popular José Ángel Santos, destaca que «están chegando parellas novas ao municipio e como vén que ofrecemos servizos e axudas, acaban asentándose». Friol, por su buena salud presupuestaria, ofrece una ayuda de 1.000 euros por el nacimiento de un niño y 200 en un lote de productos. También ofrece bonificaciones fiscales en las licencias para reformas viviendas y para el asentamientos de empresas.

José Ángel Santos, alcalde de Friol: «Tratamos de xerar ilusión, de ofrecer un pobo acolledor e con servizos».

El alcalde destaca que por ejemplo el próximo curso abrirán la guardería por las tardes y ofrecerán el programa de madrugadores en el colegio para que los padres que trabajen en Lugo puedan dejar a sus hijos. Y es que en estos momentos Friol tiene 44 menores de 3 años.