El propietario de la gasolinera de As Saamasas teme la tardanza de Carrefour en ejecutar el cierre de su instalación

André Siso Zapata
André S. Zapata LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

Óscar Cela

El proceso legal se podría alargar varios meses, si se va hasta el final en el ámbito burocrático

30 nov 2020 . Actualizado a las 16:55 h.

El propietario de una de las gasolineras de As Saamasas, en Lugo, y que consiguió derrotar judicialmente al gigante francés del comercio, Carrefour, al exigir el cierre de su establecimiento, se muestra preocupado por la posible tardanza de los franceses a la hora de ejecutar esta liquidación.

Según la legalidad vigente, el Concello de Lugo podría instar a la ejecución legal de la sentencia a partir de los dos meses del fin de la licencia, es decir, el día dos de enero del 2021. Mientras, el ayuntamiento tiene el poder de imponer hasta diez multas coercitivas a la empresa si no ejecuta el cierre del establecimiento, que podría tardar meses en caso de que se lleven hasta el final los trámites burocráticos. Esto representaría un problema en caso de que ocurriese algún accidente en la gasolinera ahora que no tiene licencia. El Concello espera poder tratar este asunto en la próxima Xunta de Goberno Local, ya que no recibieron la notificación efectiva hasta este mes, por lo que no pudieron abordarlo antes.

La recepción del Concello

Fue el pasado día dos de noviembre cuando el Concello de Lugo recibió la notificación del Tribunal Supremo, que no admitió a trámite un recurso de casación presentado por la multinacional francesa y con el que trataba así de paralizar la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia que estimaba que la gasolinera no contaba con licencia legal. La respuesta del Supremo la recibió el ayuntamiento lucense por ser la administración que dio una licencia que, posteriormente, el juzgado dijo que era ilegal. Carrefour se queda así sin opciones y agota todas las vías legales para tratar de regularizar la situación de la gasolinera. 26 años tiene la instalación ubicada a la vera del Miño, aunque la función como suministrador de combustible es más reciente.