El capitán de la 1ª Compañía, Amadeo Villarino, pasa a la reserva
30 may 2020 . Actualizado a las 19:36 h.Con los 61 años que cumplirá mañana, el capitán jefe de la 1ª Compañía de la Comandancia de la Guardia Civil de Lugo, Amadeo Villarino, se despide de Lugo. Este ourensano, que ingresó en el Cuerpo en 1979 y que escogió esta provincia para casi finalizar su carrera, pasa a la reserva.
A la Comandancia lucense llegó en diciembre de 2017 y a su cargo estuvieron trece puestos y 120 agentes. Trabajó hasta el último día (y más aún teniendo en cuenta la crisis sanitaria) pero en estas últimas semanas fue sacando huecos de su agenda laboral para desplazarse a los puestos que dirigía y despedirse de todos los suyos. «Los agentes que tuve a mi mando se involucraron mucho. Son muy profesionales y trabajadores. Quiero hacer también una mención especial a los profesionales de la oficina, esos que no están en la calle pero que hacen una labor imprescindible y magnífica. También a mi conductor, que siempre estuvo a mi disposición para salir a cualquier tipo de servicio. Y por supuesto, al coronel y resto de oficiales, que demuestran a diario su valía y capacidad de trabajo», asegura.
Amadeo Villarino también buscó momento para despedirse de varios alcaldes, con los que compaginó desde el primer momento y con los que fue fortaleciendo la confianza tras poner en marcha dos de sus planes prioritarios: El Plan Mayor y Plan Director, dos iniciativas del Cuerpo que acercan a la Guardia Civil a los mayores y a los niños. «Además de los alcaldes, que siempre mostraron su colaboración, tengo que destacar el gran trabajo de los dos guardias que se encargaron de llevarlos a cabo», manifiesta.
Pasó por varias provincias y por diferentes unidades del Cuerpo, pero si le dan a escoger para repetir, este capitán se quedaría con el Servicio Marítimo de Marín y con la Compañía de Lugo. «En cuanto al primero, mandas sobre toda la plantilla y moldeas la unidad a tu gusto; en cuanto a la segunda, es un lugar tranquilo y con gente muy trabajadora», concluye.