¡Matutino ya tiene preadoptante!

María Guntín
María Guntín LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

CEDIDA

Carla, su madrina, recibió una gran alegría y explica que este pero tendrá un nuevo hogar cuando se permitan las adopciones

25 abr 2020 . Actualizado a las 18:45 h.

Matutino ha conseguido un hogar. Es un perro de cinco años que está ciego y que ahora mismo pasa el confinamiento en la Protectora de Animales y Plantas de Lugo. Desgraciadamente, para él la vida no ha cambiado mucho desde que se decretó el estado de alarma. Sigue viviendo en una jaula y sin apenas salir a pasear porque los voluntarios que lo sacan no pueden acudir a la perrera para evitar así el riesgo de contagio entre los pocos trabajadores que tiene la entidad.

Matutino pesa sobre 15 kilos y es de color marrón. Además, como bien define su madrina, es redondito y está, como dirían las abuelas, «ben mantido». Pero si alguien conoce a Matutino es Carla Cociña. Es voluntaria de la protectora desde el verano pasado porque siempre le gustaron mucho los perros. Y, desde antes del verano, le lleva juguetes y lo saca a pasear porque es su madrina. Ahora, sabiendo que Matutino tendrá un nuevo hogar, Carla está muy feliz. Una mujer se puso en contacto con ella tras leer la noticia en La Voz.

Matutino,  a la izquierda de Carla, su madrina
Matutino, a la izquierda de Carla, su madrina

Paciencia, amor y cariño

Carla va todos los sábados a pasearlo y es que siempre que puede, se escapa para ir a la perrera. «Me enganché totalmente. Desde el principio pregunté por Matutino, que al principio no me quería ni ver ni tampoco comer nada de lo que yo le daba», explica esta mujer. Pero a base de paciencia, amor y cariño, se lo ganó, «siguiendo las indicaciones de la gente de la protectora, que me ayudó mucho», añade Carla.

Matutino llegó a la perrera acompañado por Matutina. No está claro que sea su hermana, pero se parecen mucho y son buenos compañeros. El porqué de su nombre tiene una explicación. Los abandonaron a los dos atándolos a un poste que está situado cerca del almacén de la protectora el 25 de agosto de 2018. Un voluntario los encontró muy temprano, por la mañana.

Matutina también es miedosa, pero muy cariñosa. Y por el momento, no ha tenido la suerte de Matutino ni ha conseguido un hogar. A estos dos perros los protege Crispín, un animal muy digno que los sigue vayan a donde vayan. «Con paciencia, cariño y ganas, son todo amor. Solo quieren mimos y paseos», sentencia Carla.