Los salones de peluquería para perros triunfan en Lugo

María Guntín
María Guntín LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

ALBERTO LÓPEZ

Son, al menos, 15 centros los que ofrecen servicios de lavado, corte y secado

16 feb 2020 . Actualizado a las 12:26 h.

En el centro de Lugo hay más de 15 establecimientos que se anuncian en Internet y ofrecen servicios de peluquería canina, algo que no es de extrañar en la ciudad gallega con más perros por habitante y es que en la capital hay más de 16.000 censados. Es decir, uno por cada algo más de cinco habitantes. Hay más animales que niños y jóvenes de entre cero y 19 años, según datos del Rexistro Galego de Identificación de Animales de Compañía (Regiac).

Loli Souto y su marido están al frente de Pets R Us, situado en la calle Marina Española, aunque pronto trasladarán la tienda a otro local más grande situado en la rúa de San Roque. Allí pondrán en marcha una academia de peluquería canina para formar a personas en este ámbito, algo que ya hacen en el local actual, aunque a menor escala. Ayer, la modelo fue Daisy, una bichón maltés que acude semanalmente al centro para recibir un baño. Loli es veterinaria de formación y cobra por horas, en función del animal y de sus características.

Los perros que pasan por este salón canino se bañan con un champú adecuado, dependiendo de su color de pelo y de sus necesidades. También se les echa una mascarilla después y, finalmente, se aclara. También hay espray de acabado para que el pelo de los animales quede lo más brillante posible e incluso mascarillas que no precisan aclarado y que contienen proteínas. A la hora de secar, se usa un expulsor o un secador normal. Si hay nudos, el pelo se desenreda en seco. El servicio completo que ofrece Loli, además de otras tiendas especializadas, incluye baño, corte, secado, corte de uñas, limpieza de oídos y de las partes higiénicas. Para un perro pequeño, oscila entre los 25 y los 30 euros.

La veterinaria Ledicia Gómez está al frente del Centro Veterinario A Piringalla y explica que la mayor parte de los perros que pasan por el servicio de peluquería son de pequeño tamaño. El trabajo aumenta en primavera, justo antes del verano. «Hay semanas de diez y días de cuatro o cinco perros, el precio depende del tamaño del animal», explica.

Vicente González, de Agrizoo, explica que el precio va acorde con el estado en el que se encuentre el perro.

Lucía Folgueira, de Barbudos, cuenta que atienden una media de 15 o 20 perros a la semana que pasan por el servicio de peluquería. «Últimamente vienen muchos cachorros, pero también perros mestizos, de tamaño mediano, que acaban de salir de la protectora», añade esta mujer, que también explica que emplea la técnica del stripping, que consiste en sacar pelo muerto del animal. Está dirigida a perros con pelo duro. Los servicios de Barbudos incluyen siempre corte de uñas, limpieza de oídos y de las partes higiénicas.

ALBERTO LÓPEZ

Ozonoterapia y dermocosmética, servicios innovadores para los animales

Loli Souto también ofrece en su centro servicios relacionados con la ozonoterapia. «A veces, el veterinario receta un champú con medicación a los perros que tienen dermatitis. Lo aplicamos con agua ozonizada y así, las patologías se curan mucho más rápido», añade la profesional. También ofrecen dermocosmética especializada para combinar con el agua ozonizada.

«Antes se recomendaba bañar a los perros una vez al mes porque los champús eran más agresivos y menos delicados, pero ahora no hay problema incluso si se quieren bañar todos los días porque hay productos más especializados», cuenta Loli, que también analiza la importancia de que los animales se encuentren bien por su repercusión directa en la salud pública.

«La peluquería canina es también la mano derecha del veterinario porque damos la voz de alarma si comprobamos que el animal está mal», añade la veterinaria.

Perros con problemas

Es tal la cantidad de perros y el cambio de mentalidad que se produce desde hace unos años a favor de su bienestar que hay centros como el de Loli que próximamente se especializarán en animales con movilidad reducida. «Nosotros tendremos grúas, así como aparatos especializados que nos permitan atender a animales que, por ejemplo, no puedan sostenerse de pie ni caminar», añade la mujer, que también explica que aún queda mucho por hacer para que la mentalidad lucense se sitúe a la par de la de otros países europeos.