La Guardia Civil detiene a una falsa médica que ejercía en un geriátrico de Outeiro de Rei

Tania Taboada LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

CARLOS CASTRO

La mujer, de 26 años, trabajaba de profesional sanitaria y carecía de la titulación oficial necesaria

14 feb 2020 . Actualizado a las 18:10 h.

Agentes de la Guardia Civil han detenido a una mujer de 26 años de edad que trabajó como médica en un centro geriátrico en el municipio lucense de Outeiro de Rei y que carecía de la titulación oficial necesaria para ejercer como tal. El instituto armado inició la investigación tras ser alertado por el Colegio Oficial de Médicos de Lugo. La falsa facultativa, que estaba en el foco de los investigadores desde noviembre del año pasado, fue arrestada hace algunos días.

La detención de esta falsa médica, vecina de la provincia de A Coruña, se produjo en el seno de una operación denominada Domus. Ya ha pasado a disposición judicial. Se la considera autora de cuatro delitos: intrusismo laboral, contra la salud pública, falsedad documental y falsificación de certificados oficiales.

Colegio de Médicos

Los hechos se remontan a noviembre del año pasado, cuando el presidente del Colegio de Médicos de Lugo, Manuel Boquete, informaba de un intento de colegiación falsa detectado.

El facultativo explicaba que el 17 de octubre, una persona se presentó en la sede colegial con documentación para intentar solicitar su número de colegiado. Los papeles eran falsos, tal y como comprobaron en el colegio.

Esta persona presentó la certificación de la Universidade de Santiago de Compostela y de su trabajo en el geriátrico DomusVi de Outeiro de Rei y, seguidamente, se le proporcionó un número de colegiación.

Acto seguido, pidió un talonario de recetas privadas y otro de estupefacientes, que recogió el 30 de octubre del año pasado. Al día siguiente, el Colegio Médico recibió una denuncia que alertaba de que la persona en cuestión había trabajado en calidad de técnico de farmacia en años anteriores.

A raíz de esta comunicación, el colegio contactó con la USC y el 5 de noviembre recibió una notificación que confirmaba que la persona implicada nunca había estado matriculada en dicha universidad, de lo que se dedujo que la certificación era falsa.

El colegio comunicó la incidencia al centro donde estaba trabajando y convocó una reunión urgente de la Comisión Permanente de la Junta Directiva del Colegio Médico. Se adoptó la decisión de anular la colegiación y se le solicitó la devolución de los talonarios en un plazo de 24 horas. Además, se acordó iniciar un procedimiento judicial contra esta mujer.

Manuel Boquete explicó que «es un hecho punible desde todas las circunstancias y que el Colegio Médico ha de garantizar que todos los colegiados estén habilitados para ejercer la profesión médica».