Christian Díaz renueva y se suma a Quintela y Kabasele en la lista de jugadores fijos para el curso que viene
11 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Ante todo mucha calma. Es el mensaje del Leche Río Breogán para los aficionados más impacientes que se echan las manos a la cabeza por la dilación de los movimientos en la plantilla. «Paciencia, hay que tener paciencia. En estos momentos hay motivos suficientes para no perder la calma y ser optimistas. Acabamos de incorporar un técnico de ACB y un médico, tenemos un patrocinador importante y otros que nos siguen apoyando... El club está consolidando su estructura, una estructura muy sólida y de garantías», apunta Tito Díaz, el nuevo director deportivo del club.
Lo cierto es que a día de hoy el conjunto breoganista no tiene más que tres jugadores en su plantilla. A Sergi Quintela y Kabasele, que regresaron de su cesión con compromiso firmado para la 2019-2020 y que esta vez no se moverán de Lugo, se suma Christian Díaz. El club lo consideraba una pieza imprescindible en el nuevo proyecto para la LEB Oro y ayer por fin pudo cerrar y anunciar la continuidad del base canario, que cumplirá su tercera temporada como director de juego de los celestes. Ricardo Uriz y Salva Arco podrían ser los próximos en apuntarse al viaje de regreso a la Liga Endesa. «Desde que acabó la temporada estamos en contacto casi a diario con los agentes de aquellos jugadores que nos parecen interesantes para el equipo», subraya Tito Díaz. El mánager general confirmó la permanencia en la plantilla de Sergi Quintela y Herve Kabasele y anunció que los fichajes no tardarán en llegar. «Estamos en conversaciones con muchos jugadores y en algunos casos están muy avanzadas», indicó.
Una vez descartados aquellos con una cotización inasumible como McCallun, Redivo o Brown, en el plantel que acabó la última liga hay más integrantes al margen de Christian Díaz que entran en los planes de la dirección deportiva, si bien parece que solo Salva Arco y Ricardo Uriz están al alcance. Sergi Vidal y Sulejmanovic también son del agrado de los responsables de la parcela técnica, pero parece difícil que sigan en Lugo.