El metro de terraza en Lugo: 19 euros en el centro, 3,72 en Augas Férreas

Lorena García Calvo
lorena garcía calvo LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

ALBERTO LÓPEZ

El coste para los hosteleros lucenses es inferior al de A Coruña y mayor que el de Vigo

03 jun 2019 . Actualizado a las 13:22 h.

Las terrazas ya no son solo para el verano, aunque es con el buen tiempo cuando más brota la vida en ellas. En los diferentes barrios de la ciudad es posible encontrar mesas y sillas en el exterior de los locales de hostelería, y muchas de ellas ya tienen carácter permanente y no solo funcionan durante la primavera y el verano, como era habitual antes de la entrada en vigor de la ley del tabaco.

Resuelto el conflicto que se planteó hace dos años con el Concello lucense por el coste del metro cuadrado de superficie pública aprovechada, la horquilla de precios que ahora se maneja en la ciudad oscila de los 19,32 euros por metro cuadrado al año en las calles y plazas calificadas de primera categoría, hasta los 2,28 que deben abonar los negocios ubicados en las de quinta.

El casco histórico, de primera categoría

La gran mayoría de las calles y plazas del casco histórico lucense están encuadradas en la primera categoría y por lo tanto cada terraza allí instalada paga 19,32 euros por cada metro cuadrado que ocupa al año. La calle de la Tinería o la rúa Miño, por ejemplo, están catalogadas en el segundo escalón en la lista de tasas fiscales y precios públicos, y por lo tanto abonan 5,28 euros por metro cuadrado aprovechado.

La Praza de Augas Férreas, en la que abundan las terrazas, está enmarcada en la tercera categoría, por lo que los negocios de hostelería que se sitúan allí abonan 3,72 euros por cada metro cuadrado de superficie que ocupan. Lo mismo, por ejemplo, que en la Avenida de Magoi o en la rúa Campos Novos. En la rúa Divina Pastora, en A Milagrosa, el precio sería ligeramente más elevado, puesto que es de segunda categoría y por lo tanto el coste es de 5,28 euros el metro.

Las terrazas situadas en calles de tercera y cuarta pagan igual, 3,72 euros, mientras las de quinta abonan 2,28 euros por metro cuadrado al año.

La comparativa por ciudades

Con los datos del 2018 en la mano, el precio del metro cuadrado de terraza en el casco histórico lucense entra dentro de lo razonable si se compara con las otras ciudades gallegas. En A Coruña, por ejemplo, su precio es de 25 euros par los negocios situados en zonas de primera categoría para todo el año, y si se montan de abril a septiembre el coste es de 15 euros por metro cuadrado aprovechado. En la ciudad herculina la categoría más baja paga 12,50 euros, la mitad que la máxima, mientras en Lugo la diferencia entre escalafones es notoria.

«Pagar ahora 19,32 euros por metro cuadrado en el casco histórico creo que es adecuado. El casco histórico lo es para bien y para mal. Es un barrio distinto y tiene que tener más atención para ciertas cosas, pero también unos precios para otras», valora Luis Latorre, presidente del colectivo Lugo Monumental.

El responsable de la asociación de hosteleros y comerciantes del casco histórico recuerda que en cada ciudad rigen ordenanzas variadas y pone como ejemplo que Pontevedra calcula el precio por el conjunto de una mesa y cuatro sillas (serían unos 108 euros al año). «Ourense cobra por cada dos metros cuadrados sobre 47 euros, Ferrol 30, Santiago 27 y Vigo es un caso diferente porque su política es de potenciar las terrazas en la calle y las de primera categoría abonan 5,34 euros por metro cuadrado al año, y las de sexta 0,75».

Una normativa rige cómo deben ser mesas y sillas para unificar el casco histórico

Abonar las tasas correspondientes por el aprovechamiento de la vía pública y no obstaculizar ni entorpecer el paso de vehículos y personas no son las únicas normas que deben cumplir las terrazas de los locales de hostelería del casco histórico de Lugo. También deben acatar cuestiones como que el espacio debe ser limpiado un mínimo dos veces al día, una vez sobre las 16 horas, y otra al cierre.

Como norma general, está prohibido instalar en las terrazas equipos de música y amplificadores, así como máquinas automáticas o mobiliario no recogido en la normativa, que intenta unificar la imagen en el casco histórico, aunque desde Lugo Monumental abogarían por una legislación más flexible, proponiendo por ejemplo que el Concello diese el visto bueno a los proyectos, lo que evitaría disparates.

En el área del recinto histórico la legislación establece que el mobiliario sea igual en formas, materiales, tamaños y colores y que en ningún caso llevarán publicidad o el nombre del local. Las sombrillas deberán ser de un color determinado y el mástil central de aluminio pintado en gris mate o en madera, a juego con el resto del mobiliario.

En las mesas y las sillas los hosteleros pueden elegir entre tres modelos permitidos. Los calefactores estarán lacados en gris mate o en blanco, en función del resto de elementos. Y también existe una norma que regula los divisores o cortavientos.

En el barrio de A Tinería el abanico de sillas y mesas se amplía a una cuarta opción, mientras San Marcos y la Praza Maior tienen otros matices.